Los dos grupos que batallan por el control de la seccional de la UOCRA de La Plata protagonizaron ayer otro feroz enfrentamiento que dejó un saldo de 10 heridos en la localidad de Ensenada. Fue una especie de «bienvenida» a Oscar Rizzo, flamante interventor del gremio nombrado hace apenas 48 horas por Gerardo Martínez.
El violento enfrentamiento callejero se produjo entre la facción que responde al ex jefe del gremio Juan Pablo «Pata» Medina y la que encabeza Iván «El General» Tobar, quien busca desplazarlo por completo de la conducción del gremio.
Las cámaras de seguridad del municipio ubicadas en las calles capturaron imágenes donde se observan a integrantes de ambos bandos de la UOCRA a las corridas y lanzándose objetos contundentes.
El hecho ocurrió en la puerta 2 de la petroquímica de YPF cuando un grupo de trabajadores intentaba ingresar al predio y el otro se lo impedía.
Durante la semana hubo varios cruces entre ambos grupos en pugna de la UOCRA-La Plata y la pelea de este jueves habría sido motivada como venganza del grupo de Tobar, que habría sido atacado días atrás por la facción de Medina.
Al menos 10 personas sufrieron lesiones, la mayoría con heridas cortantes en sus rostros.
El «Pata» Medina y su hijo Cristian «Puly» Medina, fueron corridos de la conducción del gremio tras ser imputados por «asociación ilícita, extorsión y lavado de activos» y actualmente cumplen arresto domiciliario a la espera del juicio.
Esta situación provocó que Iván «El General» Tobar, líder de la agrupación Blanca y Azul e identificado como integrante de la barra brava del club Estudiantes de La Plata, buscara hacerse con la jefatura del sindicato, lo cual es resistido por Medina.
Esta batalla callejera ocurrió poco después de la renuncia del dirigente gremial César Trujillo, quien abandonó su cargo como interventor de la UOCRA seccional La Plata.
En su lugar, hace apenas 48 horas desembarcó Oscar Rizzo. Nombrado por Gerardo Martínez, Rizzo viene de la seccional Lomas de Zamora donde le tocó lidiar con los resabios de otro peso pesado de la construcción, Walter «Lobizón» Leguizamón.
La principal misión de Rizzo será bajar los niveles de tensión que se viven en el sindicato y que escaparon a niveles insospechados esta semana.
En el horizonte, además, están las elecciones de normalización del gremio que sigue intervenido. Con esos comicios debería saldarse la batalla entre Medina y Tobar y dar paso a una nueva conducción legitimada por los obraros de la construcción de la zona.
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