A La CGT le robaron el atril y la lápicera

(por pablo cano) No piense mal de nosotros amigo lector…le estamos citando esta nota del gran diario argentino del día 26/06 (https://www.clarin.com/politica/cgt-robaron-atril-lapicera-electoral_0_BJqBGYCm-.html) para entender cómo opera sobre el vasto universo del movimiento obrero el ejercicio electoral finalizado el último sábado por la noche, el desesperante cierre de listas. Algo habíamos anticipado en notas anteriores respecto de cómo se alineaban las diversas escuderías que integran el mundo sindical a la hora de mojar en las listas y está claro que el prejuicio que denota el título del diario del sr. Magnetto soslaya que varios cuadros provenientes de la formación gremial ascienden con posibilidades de ingreso a diversas legislaturas -nacionales y provinciales- lo que deja entrever, entonces, que lo que ha sucedido es que ese «cobro» no estuvo cerca del poder institucional que conduce  la CGT, lo que al fin de cuentas, un actor corporativo como Clarín, toma como una derrota.

Sin embargo, habrá que hacer memoria profunda para encontrar en una lista del Peronismo -la lista de Unidad Ciudadana lo és mas allá de la composición técnica del frente electoral- un dirigente gremial que esté entre los primeros 5 lugares para la Cámara de Diputados de la Nación. Probablemente sea la primera vez que tal condición recae en una mujer. Vanesa Siley, de ella se trata, no sólo reúne las condiciones citadas sino que es ostensiblemente una dirigente sub 40. La secretaria general del gremio de Judiciales SiTraJU, nacido por obra y gracia de Julio Piumato al prácticamente echar al sector de Siley en la UEJN, expresa en sí misma la aparición en las grandes ligas de la política y del movimiento obrero de la generación de trabajadores ingresados al sindicalismo durante el primer gobierno del Kichnerismo y que ya llevan una larga década de militancia.

También Walter Correa y Hugo Yasky conforman la lista de Unión Ciudadana con inmejorables chances de ser diputados a partir del próximo 10 de diciembre y, de esta forma, podría decirse que la lista que encabeza CFK lleva prácticamente un 25% de candidatos provinientes del movimiento obrero. Los hechos son sagrados, no podrá decirse ya que CFK tiene algún prejuicio para con la corpo sindical. Dato sustancial que se filtró sobre los post cierre es que habría habido una charla con Sergio Palazzo que también explica la presencia de Siley y Correa en las listas, ya que ambos integran la Corriente Federal de los Trabajadores que, para más dato, se presenta como una línea interna dentro de la CGT conducida por el triunvirato.

Sí es cierto que la ausencia de los Daer/Schmid/Acuña en las diversas listas del Peronismo a lo que debe agregarse la evaporación de la presencia de los Moyano en los cierres permite olfatear un cambio de época en las cimas del movimiento obrero; cambio que, como toda movida en este sector, suele realizarse en «slow motion» pero aún así los actores perciben que «algo se esta yendo para no volver».

A los efectos de completar la tira, vale mencionar la ausencia de los espacios sindicales cercanos a Cambiemos en sus listas con mínimas salvedades, como el taxista José Ibarra (integrante de las 62 que se referencian en el Momo Venegas) que compite con chances en la boleta del Macrismo en Salta.

Por último, para ilustrar esta nota elegimos la imagen de David Ulises Lobo, dirigente de la Federación Gráfica Bonaerense que tiene altas chances de consagrarse como concejal en la localidad de San Martín. Lobo es un emergente de las luchas de los gráficos profundizadas en los últimos años a partir de la crisis que atraviesa el sector (desde los despidos en AGR hasta el cierre de Donelly) y fue tanto por el apoyo que recibió por parte de su conducción gremial -en especial el «Gringo» Amichetti- como por el reconocimiento de varios diputados del FPV que valoran su trabajo gremial y territorial, que coló en la lista de Unidad que trabajosamente se cerró en el municipio al comando de Katopodis justamente para enfrentarse con éste en las urnas. También él es un dirigente que se inició en su sindicato en los días de las paritarias que le ganaban a la inflación y hoy hacen su debut electoral para frenar el cierre de las empresas.