
SMATA paralizó las automotrices y convocó a los trabajadores del sector a participar de la movilización a Plaza de Mayo. Fue el gremio que causó mayor impacto en la producción. La dupla Pignanelli y Manrique sostiene su vínculo cercano con CFK.
El poderoso gremio de mecánicos SMATA paralizó la industria automotriz argentina y convocó a la movilización en apoyo a Cristina Fernández de este miércoles. Casi todas las plantas del área metropolitana, en donde opera el gremio SMATA, tuvieron que detener la producción debido al alto ausentismo de los trabajadores.
De hecho, la columna del SMATA que se reunió temprano frente a la sede gremial de la Avenida Belgrano fue de las más importantes del mundo sindical y de las primeras en ingresar completas a la Plaza de Mayo.
De este modo, las fábricas de Ford y Volkswagen en General Pacheco, la de Toyota en Zárate, y la de Mercedes-Benz en Virrey del Pino cancelaron turnos de producción. En todos los casos, la interrupción en los planes de producción fue únicamente por el turno mañana, y los trabajadores del turno tarde se incorporaron normalmente.
Sólo hubo actividad en la planta de Peugeot/Citroën en Palomar no tuvo alteraciones de producción, cuyos trabajadores no están encuadrados en el SMATA, al igual que la de Fiat en Córdoba.
Con la participación masiva del gremio de mecánicos el binomio Ricardo Pignanelli, su secretario General y vicepresidente del PJ Nacional, y Mario «Paco» Manrique, secretario Adjunto y diputado nacional, ratificaron su adscripción a la conducción de CFK.