Se agudiza la crisis industrial: la fábrica de cerámicas ILVA efectivizó 300 despidos en su planta de Pilar y busca pagar el 50% de las indemnizaciones

Todos los trabajadores de ILVA fueron notificados de su desvinculación. Son 300 que cumplían tareas en la planta ubicada en el Parque Industrial de Pilar. La empresa no se presentó a la audiencia en el Ministerio de Trabajo.

Tras el cierre sorpresivo de sus portones del lunes por la mañana, este martes, la totalidad de los trabajadores de la fábrica de pocellanatos ILVA, del Parque Industrial de Pilar, recibieron los telegramas de despido que la empresa había anunciado a fines la semana pasada. En total, fueron desvinculados unos 300 obreros.

En tanto, los representantes de la empresa no se hicieron presentes este martes en la sede local del Ministerio de Trabajo, donde se había fijado una audiencia.

«La empresa no se presentó. Nosotros hicimos el descargo y el rechazo a las cartas de documentos que ya les llegó a todos los compañeros, que son 300. Ahora se fijó una audiencia para el día jueves a las 9.30 reclamándole al Ministerio que le exija a la empresa que se presente presencialmente», le dijo al portal local Pilar a diario Marcelo Barrionuevo, delegado de la planta y él mismo trabajador despedido.

Mientra tanto, «seguimos la lucha: con todos los compañeros nos vamos a ir rotando. Va a venir un grupo a la mañana, otro grupo va a estar de noche hasta lograr que el objetivo la reincorporación», señaló Barrionuevo.

Se agudiza la crisis industrial y la fábrica de cerámicas ILVA efectivizó los 300 despidos de su planta de Pilar

Para sumar tensión la empresa busca efectuar los despidos amparándose en el artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo, que le permitiría reducir la indemnización hasta un 50% en caso de fuerza mayor. Los trabajadores impugnarán esa medida ante las autoridades, pero esperan un conflicto largo y de resolución incierta.

A pesar de la crisis que aducen sus directivos, ILVA adquirió recientemente costosa maquinaria para modernizar su producción, ahora detenida en un 100%.

Por eso, desde el sindicato no descartan que la medida no busque un cierre de la planta sino una reducción drástica del personal y un empeoramiento en las condiciones de trabajo de los que queden adentro.

“Hoy los trabajadores hacen régimen de ‘4×4’, es decir que trabajan cuatro días durante doce horas y descansan los cuatro que siguen”, explicaron las fuentes. Sin embargo, en ILVA querrían “cambiar a ‘6×1’, que supondrían menos horas de trabajo por día, pero también un 30% menos de salario”. La medida también implicaría la desaparición de los servicios de comedor y transporte, además del corte de la cobertura de medicina prepaga.