«Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar»: el clima de los pasillos de la CGT, que ahora espera que se desinfle Milei para pegar su pleno a Massa

El arribo de Massa a Azopardo dejó la sensación entre los dirigentes cegetistas de que recuperaron el protagonismo. Con la incógnita de cómo la inflación puede influir en términos electorales y la esperanza de un Milei «desinflado», ya programan actividades para poner la militancia en acción. La idea es contagiar a las bases.

Tras pasar todo el año pasado con sus referentes casi resignados a un regreso de Juntos por el Cambio al poder en medio de la crisis económica, la plana mayor de la CGT recuperó, a través de la candidatura de Sergio Massa, la ilusión de que el peronismo pueda retener la Presidencia y la mayoría de sus integrantes subrayan que era el dirigente más competitivo del espacio.

Si bien reconocen las dificultades que representa la inflación para el Gobierno y la postulación del ministro de Economía, los popes de la central últimamente vienen sacando pecho de que lograron -junto a los gobernadores- imponer a Massa como candidato en medio de la dura interna del cierre de listas que tenía casi definidos como postulantes a Eduardo «Wado» de Pedro y Daniel Scioli.

Algo que contrasta bastante con los ánimos que había en 2022, cuando Massa estaba lejos de la toma de decisiones, como presidente de la Cámara de Diputados, y Martín Guzmán manejaba la economía del país, y dirigentes de la CGT reconocían sin vueltas en reuniones cerradas entre ellos que Juntos por el Cambio iba a retomar la Presidencia en diciembre de este año

"Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar": la sensación en la CGT que ahora espera que se desinfle Milei y apuesta un pleno a Massa

«Pusimos al candidato presidencial, eso fue un triunfo para nosotros, pero ahora está claro que viene un desafío: a los desencantados, volver a enamorarlos. Y para eso, tenés que arrancar con los que tienen un poco de más consciencia que son los laburantes», sostuvo uno de los dirigentes más influyentes de la central en un encuentro reservado con periodistas.

Además, los gremialistas ya le hicieron saber al candidato que la falta de lugares en las listas tiene que compensarse con espacios en la gestión. Un primer paso fue integrarse, orgánicamente, a las mesas de trabajo de campaña,

Consultado por el lastre que podría ser el problema de la inflación para las aspiraciones de Massa, señaló: «La inflación nos jode a todos, pero en parte yo creo que se naturalizó un poco. Porque si eso hubiera sido determinante, no hubiera sido candidato. Claro que la inflación jode, más allá de los bolsillos de la gente, porque es un problema que te frena la inversión, te frena todo».

Por otro lado, el dirigente aclaró que la CGT no encargó encuestas, pero sostuvo que circulan algunas en las que la suma de Juntos por el Cambio (Patricia Bullrich más Horacio Rodríguez Larreta) «deja tres puntos abajo» a Unión por la Patria.

«Si esos son los números, creo que con ese escenario ganar las generales es totalmente posible, porque el 14 de agosto arranca otra campaña», agregó.

Además, dijo que ve probable que Javier Milei se desinfle y así recuperar los votos que estiman que eran del peronismo y habían pasado el líder libertario: «¿O acaso quién le afanó buena parte de los votos al peronismo?», se preguntó aludiendo al diputado de La Libertad Avanza.

En un escenario en el que se observa una dirigencia gremial más entusiasmada con la postulación de Massa que las propias bases, los popes buscan encarar el desafío de militar y trasmitir hacia abajo un mensaje de entusiasmo.

«El movimiento obrero tiene estructuras orgánicas que cuando las ponés en marcha son importantes para eso, el tema es como organizarlo y en eso estamos», agregó al respecto.