Los múltiples lazos con el mundo sindical de Raquel «Kelly» Olmos, la flamante ministra de Trabajo

(Por Ana Flores Sorroche) Su nombre completo es Raquel Cecilia Kismer de Olmos. Es una histórica dirigente peronista del PJ Capital. Formó parte del menemismo aunque su discurso económico era industrialista. Se define feminista y pide el cese de la persecución política a CFK. Pugna por la doctrina peronista, a la que considera vigente frente a la exclusión del capitalismo salvaje, aunque trabaja por su actualización. Este martes el presidente le tomará juramento como nueva ministra de Trabajo.

Conocida como «Kelly» Olmos, Raquel Kismer creció en la «Siberia» de Villa Urquiza, dicen que llamada así por el mismísimo Carlos Gardel en los años treinta, cuando era un arrabal obrero. Ella asistió a la secundaria en la escuela comercial «Carlos Pellegrini» que depende de la UBA. Luego se recibió de licenciada en Economía, también en la UBA, se especializó con un máster en economía urbana en la Universidad Torcuato Di Tella y tiene un posgrado en Formulación y Evaluación de Proyectos de Inversión (INPE-OEA-CEPAL). Además fue consejera superior y directora del Instituto de Administración, Gobierno y Economía de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF).

El apellido Olmos que lleva por opción proviene de su marido, Orlando, también militante peronista, con quien tiene tres hijos. Uno de ellos es Martín Olmos, actual Subsecretario de Telecomunicaciones y Conectividad.

No tiene filiación alguna con Juan Manuel Olmos, recientemente designado vicejefe de Gabinete de la Nación, con quien comparte militancia en el Nuevo Espacio de Participación (NEP) del PJ porteño.

Como militante que llegó a presenciar discursos del propio Perón en vivo, en los noventa estuvo en los armados políticos existentes en el PJ. Formó parte del menemismo porteño. Además de su trabajo en el área económica, Olmos fue concejala y legisladora por la Ciudad de Buenos Aires entre 1997 y 2000.

En 2003 acompañó la precandidatura del fallecido conductor televisivo Gerardo Sofovich a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Finalmente no se presentaron.

También se desempeñó como secretaria de Asuntos Municipales del Ministerio del Interior entre 2007 y 2009, dirigido entonces por Aníbal Fernández.

Las elecciones presidenciales de 2011 la encontraron apoyando específicamente a quien entonces ejercía el cargo para el que ahora fue designada. El exministro de Trabajo Carlos Tomada se presentaba en la lista junto a Daniel Filmus para la jefatura de la Ciudad. Allí compartió esfuerzos con el secretario general de UPCN y en ese momento vicepresidente del PJ Capital, Andrés Rodríguez. No alcanzó.

En 2014 ofreció su apoyó «incondicional» al dirigente de encargados de edificios Víctor Santa María que se presentaba como candidato a presidente del PJ Capital. «Yo admiro la tarea de Víctor en el Suterh, toda su gestión educativa y cultural son un ejemplo a seguir, es admirable» declaró entonces Olmos a La Política Online.

Ya en 2016, con motivo del Día de la Lealtad, el 21 de octubre, Kelly Olmos participó de una charla en el emblemático salón Felipe Vallese de la CGT como representante del IFAP, instituto de formación peronista del que fue cofundadora ese mismo año.

Allí instó en su discurso al «deber» de ser peronista en tiempos de crisis, para devolver la felicidad al pueblo. En ese sentido, reflexionó sobre la doctrina peronista: «Nos tenemos que preguntar si la doctrina peronista sigue vigente para el siglo 21.» Y se respondió que la realidad del mundo, que importó a la Argentina Juntos por el Cambio, es la realidad de la exclusión, «que descarta a millones de seres humanos».

«Nuestra doctrina fue construida para dar una respuesta ante ese capitalismo salvaje, que tendría otras condiciones en la década del cuarenta y hoy muestra niveles inéditos de exclusión», redondeó.

Como cofundadora del Instituto de Formación y Acción Política IFAP para la Unidad del Peronismo, ese mismo año en diálogo con La Oral Gremial, «Kelly» Olmos explicaba que el proyecto consistía en «nuclear una masa crítica de cuadros, tanto políticos como gremiales como sociales con identidad en el peronismo que podamos profundizar en la reflexión de distintos temas que el peronismo tiene que construir para poder recuperar la iniciativa y posteriormente ganar las elecciones.»

Olmos apuntaba a fortalecer los lazos entre los cuadros intermedios como caldo de cultivo para la unidad, luego de perder las elecciones en 2015.

El IFAP sostuvo un curso regular, virtual durante la pandemia, de formación político sindical que a la fecha cuenta con el apoyo de la misma CGT, de la CATT, de la Juventud de la UOCRA, entre otras. Por este curso pasaron para disertar y debatir los principales dirigentes gremiales del país. El último encuentro fue en septiembre. Tema: Obras Sociales Sindicales.

Raquel «Kelly» Olmos también tiene una veta feminista. Fue activa militante por la legalización del aborto. Sus últimas fotos datan del 35° Encuentro Nacional de Mujeres que tuvo lugar este fin de semana en San Luis.

Este martes, el presidente Alberto Fernández a quien conoce desde hace años, le tomará juramento para encabezar el ministerio de Trabajo de la Nación. Junto a ella ingresarán al Gabinete nacional otras dos mujeres, Victoria Tolosa Paz al ministerio de Desarrollo Social y Ayelén Mazzina al de Mujeres, Géneros y Diversidad.