
Mientras la Junta Electoral de ATSA Buenos Aires confirmó dos listas oficializadas para las elecciones del 7 de agosto del gremio de sanidad, la Lista Azul denunció su exclusión como una maniobra irregular. Adelantó que llevó el tema ante la Justicia para impugnar todo el proceso.
La Junta Electoral de ATSA Buenos Aires informó oficialmente a sus afiliados la lista de candidatos que competirán en las elecciones internas del gremio previstas para el próximo 7 de agosto. Según el comunicado difundido, sólo participarán la Lista Celeste y Blanca, alineada con el oficialismo y la Lista Bordó, de izquierda.
En el mismo aseguraron que la Lista Azul habría desistido de participar del proceso electoral un hecho que generó una serie de controversias.
“El acto de oficialización se realizó el 19 de junio, en cumplimiento del principio de transparencia que ha guiado el accionar de la Junta Electoral”, señala el documento, subrayando su compromiso con un proceso “democrático, ordenado y participativo”.

Sin embargo, la Lista Azul difundió un comunicado donde niega haberse retirado de la contienda y denuncia presuntas irregularidades en el proceso. “La Lista Azul no se bajó de ninguna elección. De haberlo hecho, no estaríamos haciendo campaña”, expresaron, cuestionando duramente a la Junta Electoral, a la que acusan de actuar bajo influencia de la actual conducción del sindicato.
Entre las denuncias enumeradas por la Lista Azul se encuentran la falta de exhibición de los padrones electorales, la alteración de los plazos de oficialización de listas, y la inhabilitación de uno de sus apoderados. También apuntan directamente contra Daer, a quien señalan como responsable de direccionar el accionar del proceso desde las sombras.
“Democracia es no tener miedo a un enfrentamiento en las urnas en igualdad de condiciones”, concluye el comunicado, anunciando que ya iniciaron acciones judiciales para impugnar el proceso.

Estas elecciones marcarán la salida de Héctor Daer de la Secretaría General (mantendrá de todas formas su cargo al frente de la FATSA) y la renovación de la conducción en la seccional Buenos Aires, una de las más potentes de la Federación de Sanidad y de la que históricamente emergieron buena parte de sus principales referentes.