Sin acuerdo y entre huevazos a la sede gremial, la UTA va a un paro de colectivos este martes

El Gobierno no logró que la UTA apruebe a último momento lo que las empresas ofrecieron ni habilitó el aumento de los boletos por lo que el gremio de choferes de colectivos realizará el paro que ya había confirmado esta mañana. En paralelo, choferes se autoconvocaron en la sede del sindicato a tirar huevos, criticar a la conducción de Roberto Fernández y reclamar un aumento superior a $1.800.000 de bolsillo: «Se nos cagan de risa en la cara».

El Gobierno nacional había postergado para las 16 horas de este lunes la reunión clave con la UTA y las cámaras empresarias del transporte, en un intento de última hora por desactivar el paro de colectivos previsto para este martes 6 de mayo en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

El encuentro virtual, sin embargo, encabezado por el secretario de Trabajo, Julio Cordero, convocado tras el vencimiento de la conciliación obligatoria el pasado 30 de abril y el anuncio formal de la medida de fuerza por parte del gremio que lidera Roberto Fernández, terminó nuevamente sin éxito.

Desde la UTA exigen una actualización salarial que eleve el básico de $1.200.000 a $1.700.000 de bolsillo, en línea con la inflación acumulada desde principios de año. “Es absurdo seguir escuchando propuestas que avasallan nuestra dignidad”, expresaron desde el sindicato.

Pasadas las 16 horas, algunos choferes se acercaron a la sede de la UTA donde tiraron huevazos para presiona al gremio con sus demandas. Uno de los manifestantes expresó a los móviles de televisión: «No nos sentimos representados por este muchacho. Es un empresario. Amenaza con el paro y después ¿hay paro realmente? Se nos cagan de risa en la cara. Acá no hay política, no llegamos», criticó en referencia al nivel de los salarios.

Al ser consultados por cuál sería el aumento que los dejaría conformes, el mismo manifestante dijo que esperan de mínima $1.800.000 de bolsillo: «Sin menospreciar a las demás actividades, todas las ramas laborales ganan más que nosotros, con las responsabilidades que tenemos. El registro nos dura un año y nos condena como profesionales. Si nos condena un juez como profesionales, que nos paguen como profesionales, es lo único que queremos».

Ante la posibilidad de que la conducción del sindicato levante la medida de fuerza, los trabajadores presentes aseguraron que «es lo más probable» y que se preparan para dialogar con los delegados sobre las medidas a tomar en tal caso.