Para tratar de frenar la sangría de desafiliaciones, Andrés Rodríguez avisó que les bajará la cobertura de la obra social a quienes no estén afiliados a UPCN

La determinación la motiva la constante baja de ingresos a la Obra Social, atados a una paritaria por debajo de la inflación, y la sistemática pérdida de afiliados del gremio. Se da en medio del ataque del Gobierno Nacional a los estatales con escasa respuesta de Andrés Rodríguez. UPCN comunicó que desde ahora habrá planes diferenciados y que quienes no estén afiliados al gremio deberán pagar mayores coseguros. Crisis de representación.

La guerra abierta declarada por el Gobierno Nacional a los estatales empieza a golpear con fuerza a UPCN, el gremio que comanda Andrés Rodríguez. El rol más bien pasivo de la organización ante más de los 52 mil despidos y la firma de todas las paritarias que propuso el Ejecutivo, que destruyeron el poder adquisitivo de los salarios, afectaron la relación con sus propios afiliados.

De hecho por las paritarias rubricadas por debajo de la inflación, que hacen que proporcionalmente caigan los aportes a la obra social, y por el proceso sistemático de desafiliaciones, Andrés Rodríguez tomó una determinación que ya está generando ruido: creó un plan diferenciado, con mayores copagos, para quienes se desafilien.

Así se anunció a través de un escrito de Unión Personal (UP) que informa que los valores de los coseguros dependerán del nivel de complejidad de la atención que necesiten los afiliados y que deberán comenzar a pagarse desde el primero de Agosto. Un costo adicional.

Pero aún con ese costo, se crea un doble esquema: «A su vez dividimos nuestro plan Classic en dos niveles», señala el texto de UP que detalla que para los afiliados de UPCN se incluyen los sanatorios propios de alta complejidad, los Anchorena.

Para tratar de frenar la sangría de afiliados, Andrés Rodríguez avisó que les bajará la cobertura de la obra social a quienes se desafilien de UPCN

«Si desea afiliarse a UPCN y acceder al Plan Classic Más, diríjase al delegado de enlace designado en su institución para que lo oriente en el proceso», explica.

La práctica de UPCN parece apuntar a paliar, de modo brutal, los dos mayores problemas del gremio por estas horas: la caída de ingresos de la Obra Social (a través de los coseguros) y las desafiliaciones masivas (a través de un servicio de salud diferenciado para quienes acepten quedarse). Ambas situaciones exponen el enorme desgaste sufrido por el sindicato en la era libertaria.

Los no afiliados, que aportan igual a través de sus descuentos a la obra social, ya avisaron que irán a la Superintendencia de Servicios de Salud a denunciar la situación. Consideran que se trata de «una reducción discriminatoria de la cartilla» para quienes no se encuentran afiliados a UPCN.

De hecho, desde la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), el gremio que compite por la representación de los estatales con UPCN, a través de la la Junta Interna de la Superintendencia de Servicios de Salud (organismo de control de obras sociales y prepagas) advirtieron que «una obra social no puede discriminar la cobertura médica ni la cartilla de prestadores según la afiliación sindical».

Y concluye; «Esta discriminación es absolutamente ilegal, viola la ley de obras sociales, la ley antidiscriminación y la Constitución Nacional».

Para tratar de frenar la sangría de afiliados, Andrés Rodríguez avisó que les baja la cobertura de la obra social a quienes se desafilien de UPCN