Los gremios del transporte avisan que resistirán cambios en el sistema previsional y marcharán contra los tarifazos

La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), que conduce el extriunviro de la CGT Juan Carlos Schmid, rechazó «de plano y en forma total” la iniciativa del Gobierno nacional de reformular los denominados “regímenes diferenciales” laborales del sector.

La decisión se tomó en una reunión que contó con la presencia de primeras líneas de la UTA, La Fraternidad, Camioneros, portuarios y marineros, entre muchas otras organizaciones, y en la que confirmaron su participación en la movilización que el martes 26 de febrero rechazará los tarifazos a los servicios públicos.

“Los trabajadores del transporte no somos especiales ni tampoco de privilegio: somos diferenciales. Las actividades de aeronáuticos, ferroviarios, portuarios, marítimos, fluviales y de transporte por carretera se realizan bajo condiciones laborales particulares: estamos en nuestros puestos de trabajo las 24 horas y los 365 días del año, muchas de las veces en condiciones extremas y con largos períodos sin poder ver a nuestras familias”, denunció Schmid, también líder de los portuarios y marítimos de la FEMPINRA.

Asimismo, la comisión directiva de la CATT analizó el impacto del aumento de tarifas y el efecto sobre la vida de los trabajadores del transporte: “Esto que hacen confirma una vez más la naturaleza de un trazado económico que no tiene en cuenta al trabajador”, expresó Schmid quien confirmó a través de sus redes sociales que los gremios del transporte volverán a marchar al ENRE contra el «Maldito Tarifazo».

Y adelantó que “vamos a resistir este nuevo intento de agresión sobre el sistema de seguridad social y pedir una audiencia a la Ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley para que el Gobierno nos dé explicaciones sobre este nuevo atropello a los trabajadores”.

“Cualquier medida para modificar esta regla tiene por objeto recortar derechos y poner en discusión aspectos específicos que muchas veces son ignorados por los funcionarios, y de hecho persiguen una sola razón: rebajar los haberes”, finalizó Schmid.