La UCR ve el giro a la derecha y vuelve a la carga con la Ley Mucci para intervenir en la vida interna de los sindicatos

Juntos por el Cambio insiste en la intromisión en los sindicatos. Ahora en voz del diputado Martín Tetaz retomaron la llamada Ley Mucci del gobierno de Raúl Alfonsín que busca intervenir en la vida interna de las organizaciones para sacar al peronismo de los gremios.

El diputado nacional Martín Tetaz (JxC) presentó un proyecto de ley que se entromete directamente en los estatutos sindicales bajo la excusa de «garantizar la alternancia democrática en los sistemas de elección de representantes».

El legislador opositor retomó las bases de una iniciativa que el expresidente Raúl Alfonsín envió al Congreso once días después de asumir a su cargo. La ley Mucci llevaba el nombre de Antonio Mucci, quien fuera sindicalista gráfico opositor al reconocido dirigente Raimundo Ongaro y ministro de Trabajo bajo el gobierno radical.

En aquel momento Alfonsín buscaba separar al sindicalismo del peronismo pero no fue posible. A cambio tuvo un fuerte enfrentamiento con el movimiento obrero que derivó en la reunificación de las CGT existentes consagrando el fuerte liderazgo peronista de Saúl Ubaldini.

“Las asociaciones sindicales se transformaron en empresas comerciales que muchas veces dejan de lado su objeto social. Necesitamos una Ley para devolver la alternancia y garantizar la transparencia. En este contexto económico adverso es vital el rol que cumplen los sindicatos”, declaró Tetaz.

La UCR ve el giro a la derecha y vuelve a la carga con la Ley Mucci para intervenir en la vida interna de los sindicatos

El proyecto de ley establece que la gestión deberá ser informada de forma anual para otorgar transparencia y que debe haber una fluida comunicación entre los órganos internos de la asociación y los afiliados.

Además, que se podrá reelegir un solo mandato y que se deberá esperar cuatro años para volver a presentarse como candidato a cualquier otro cargo.

El texto de la ley también propone que los afiliados puedan solicitar el cambio pasados los tres meses desde el inicio de la relación laboral por ser el plazo del período de prueba.

Pero más allá de las propuestas, el mayor problema es la intromisión dentro de las organizaciones gremiales. Un objetivo preciado de la oposición cambiemista y que recuerda al giro a la derecha de la gestión de Alfonsín.