#Hidrovía Sindicatos de Argentina y de Brasil buscan restablecer el convenio sobre transporte marítimo que dio de baja Bolsonaro

Este martes, en la sede de la Federación Sindical Marítima y Fluvial, buscarán establecer los lineamientos para crear un nuevo Convenio de Transporte Marítimo para proponerlo a ambos gobiernos. El anterior lo bajó Jair Bolsonaro.

La Federación Sindical Marítima y Fluvial (FESIMAF), que encabeza el secretario general del SOMU, Raúl Durdos, será el epicentro en donde tendrá lugar el segundo capítulo de un encuentro que tuvo su primera vuelta en Río de Janeiro la semana pasada: se trata de una agenda bilateral que encararon sindicatos y empresarios tanto argentinos como brasileros que busca “intensificar las acciones conjuntas para posibilitar un acuerdo multilateral sobre transporte marítimo en el Mercosur para que cubra de manera equilibrada los intereses de los Estados Parte como así también plantear acciones concretas para que urgentemente se recupere el tráfico marítimo bilateral”.

La FESIMAF, que nuclea a los principales gremios de la actividad, trazó los objetivos en su acto fundacional a fines del año pasado; entre otros “representar a nuestro país en todos los foros de la Hidrovía y que se modifique el régimen fiscal para disminuir asimetrías en costos de combustibles y tributarios” para tener mayor competitividad frente a buques de bandera extranjera procedentes de otras latitudes.

Sindicatos de Argentina y de Brasil piden restablecer el convenio sobre transporte marítimo que dio de baja Bolsonaro

En ese sentido, en Brasil se analizaron diferentes líneas de acción, entre ellas la posibilidad de establecer un nuevo “Convenio sobre Transporte Marítimo entre la República Federativa del Brasil y la República Argentina.”

El diagnóstico compartido entre los presentes es que esta tendencia negativa, si no se modifican las actuales condiciones, se profundizará, ya que es cada vez más difícil para las empresas competir sin regularidad por las cargas entre países. Esta situación, afecta directamente la economía de ambos países, a sus trabajadores, empresas y a la sociedad en su conjunto.

Es por eso que, tanto sindicalistas como empresarios, enfatizaron que, “urgentemente”, ambos gobiernos deben propiciar las acciones necesarias para revertir la situación: y eso es lo que empezarán a explorar de ahora más, los consensos en el arco político.

Existe un antecedente que es la ley 23.557 promulgada en nuestro país en junio de 1988 y que fuera denunciada por el gobierno brasileño en febrero de 2022 durante la presidencia de Jair Bolsonaro en un momento de tensión entre ambos países. Como resultado de la ausencia de este marco legal, entre otras consecuencias, se disminuyó el volumen de mercancías transportadas entre ambos países. Según las estadísticas de la ANTAQ (Agencia Nacional de Transportes Acuáticos) en 2021 se transportaron 341.000 TEU y en 2022 sólo 101.000 TEU entre ambos países.

Del encuentro en Brasil participaron, entre otros y además de Durdos, el Secretario General Adjunto, Maquinista Naval Superior Eduardo Oscar Mayotti (Presidente del Centro de Jefes y Oficiales Maquinistas Navales – CJOMN-) y su Secretario de Relaciones Internacionales, Capitán de Ultramar Jorge Pablo Tiravassi (Presidente del Centro de Capitanes de Ultramar y Oficiales de la Marina Mercante -CCUOMM-). En representación de la República Federativa del Brasil participaron: por la parte de armadores, el Presidente de la Asociación Brasileña de Armadores de Cabotaje (ABAC) Mark Juzwiak, mientras que por el sector sindical lo hicieron Carlos Augusto Müller en su calidad de Presidente de la Confederación Nacional de los Trabajadores de Transportes Acuáticos y Aéreos, de Pesca y Puertos (CONTTMAFF) y Ricardo Ponzi por ser el Presidente de la Federación Nacional dos Trabajadores de Transportes Acuáticos y Afines (FNTTAA).