Gerardo Martínez salió a despegarse del borrador de Reforma Laboral que el Gobierno le atribuye al Consejo de Mayo: «Ningún país crece empobreciendo a sus trabajadores»

La CGT, a través de Gerardo Martínez, reiteró su rechazo a la reforma laboral impulsada por el Gobierno y reclamó un modelo económico que priorice el empleo, la producción y los derechos de los trabajadores. Se despegó del borrador de Ley bases 2 que el oficialismo le atribuyó a esa mesa de diálogo. Aclaró que cada intento de avanzar contra los derechos laborales “solo ha generado más precariedad, desigualdad y exclusión”.

La Confederación General del Trabajo (CGT) con la firma de Gerardo Martínez expresó un enérgico rechazo al proyecto de Reforma Laboral impulsado por el Gobierno Nacional, al considerar que la iniciativa “ratifica el Decreto 70/23 en su capítulo laboral”, una medida “inconsulta y regresiva” que ya había sido cuestionada y judicializada por la central sindical.

El pronunciamiento fue encabezado por Gerardo Martínez, integrante del Consejo de Mayo, quien sostuvo que “la pobreza no es un fenómeno natural; por eso existen el salario, los derechos fundamentales del trabajo y la justicia social”. En ese marco, el dirigente afirmó que los sindicatos “son la voz organizada de la demanda” y advirtió que el país “no puede desarrollarse empobreciendo a sus trabajadores”.

Lo hizo horas después de que el Gobierno sugiriera que enviará un proyecto de Reforma Laboral que tiene el guiño del Consejo de Mayo que integra el propio Martínez como representante cegetista.

Martínez denunció que la actual política económica “carece de un rumbo que priorice el crecimiento sostenido con eje en el trabajo y los salarios”, lo que, según señaló, “retrasa cualquier posibilidad de progreso y priva a miles de argentinos de un empleo digno”.

En su mensaje, el sindicalista enfatizó que “ningún país crece empobreciendo a sus trabajadores” y que cada intento de avanzar contra los derechos laborales “solo ha generado más precariedad, desigualdad y exclusión”. Bajo los lemas #Basta y #NiUnPasoAtrás, la CGT reafirmó su posición contraria a cualquier reforma que implique una pérdida de derechos conquistados.

Gerardo Martínez salió a despegarse del borrador de Reforma Laboral que el Gobierno le atribuye al Consejo de Mayo: "Ningún país crece empobreciendo a sus trabajadores"

Asimismo, Martínez subrayó la necesidad de un “diálogo social efectivo y transparente” que involucre a todos los sectores. “La verdadera modernización del mercado laboral argentino debe orientarse al fortalecimiento de las PYMES, la promoción de la industria nacional, el incentivo a las exportaciones y la consolidación de las convenciones colectivas libres y sin restricciones”, destacó.

En otro tramo del comunicado, la CGT defendió el papel de las pequeñas y medianas empresas, a las que definió como “motor de la generación de empleo y del desarrollo regional”. Según el texto, “no son las regulaciones laborales las que afectan la competitividad, sino la falta de una política económica que genere condiciones reales para la inversión productiva y la rentabilidad sostenible”.

El documento también refutó el concepto de “costo argentino”, atribuyendo los problemas económicos al “mal manejo de la política tributaria y cambiaria”. En ese sentido, Martínez aseguró que “el salario no tiene incidencia en el costo argentino” y que el fortalecimiento de la negociación colectiva es la “llave maestra” para el desarrollo con equidad.

Finalmente, el dirigente sindical abogó por un “pacto productivo” que articule políticas activas para la generación de valor agregado, la capacitación laboral y la formalización del empleo informal.

“Queremos una Argentina productiva y exportadora, que recupere la agenda del desarrollo desde el trabajo digno, con inclusión, solidaridad y justicia social”, concluyó Martínez, ratificando la disposición del movimiento obrero a participar en el debate sobre un modelo económico “que ponga al trabajo en el centro de la escena nacional”.