
El máximo tribunal de Justicia porteño resolvió que las indemnizaciones por accidentes de trabajo deberán calcularse con el índice RIPTE, que sigue la evolución de los salarios, y dejó atrás otros criterios como la tasa bancaria o el CER, que responden a la inflación.
El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Ciudad de Buenos Aires tomó una decisión clave en materia de accidentes de trabajo: a partir de ahora, las indemnizaciones deberán actualizarse según el índice RIPTE, que mide la evolución del salario promedio de los trabajadores formales.
La resolución se dio en el caso “Boulanger c/ Provincia ART”, iniciado tras un accidente laboral ocurrido en 2023. En primera instancia, el juez había calculado los intereses con la tasa del Banco Nación; luego, la Cámara del Trabajo ordenó usar el CER (un índice vinculado a la inflación). Finalmente, el TSJ revocó ese fallo y estableció que corresponde aplicar el Decreto 669/2019, que fija al RIPTE como referencia para las indemnizaciones.
Con esta decisión, el máximo tribunal porteño sienta un precedente importante: en adelante, los juicios laborales que se tramiten en la Ciudad deberán tomar como parámetro el RIPTE y no otros índices.
El fallo también marca un hecho institucional relevante: es la primera sentencia laboral del TSJ desde que la Corte Suprema reconoció su competencia para revisar causas que vienen de la Justicia Nacional con asiento en CABA, en el caso “Ferrari c/ Levinas”.
Esto significa que los trabajadores que reclamen indemnizaciones en la Ciudad recibirán una actualización de acuerdo con cómo evolucionan los sueldos formales, y no en función de la inflación ni de las tasas bancarias.