
Becarios de la Agencia I+D+i y ATE CONICET Capital iniciaron una ocupación pacífica del organismo en reclamo por 17 meses de salarios congelados y por la falta de ejecución de subsidios para investigación científica.
Becarios de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) y representantes gremiales de ATE CONICET Capital mantienen este miércoles una ocupación pacífica en el edificio del organismo, en reclamo por la falta de actualización salarial y la suspensión de los subsidios de investigación.
Según denunciaron, los ingresos de los becarios de la Agencia llevan 17 meses congelados. Un becario doctoral del Área Metropolitana de Buenos Aires percibe actualmente $786.000, casi $200.000 menos que un becario del CONICET por las mismas tareas. Esta diferencia, remarcaron, empuja a muchos investigadores por debajo de la línea de pobreza y los obliga a sobrecargarse con horas de docencia para poder subsistir.
El reclamo también apunta a la parálisis en el financiamiento de proyectos de investigación. Los Programas de Investigación Científica y Tecnológica (PICT), principal herramienta de apoyo a la ciencia argentina, llevan casi dos años sin ejecución efectiva, a pesar de que existen fondos internacionales disponibles. “El 80% de los proyectos deberían haberse pagado con esos recursos ya garantizados. La pregunta es obvia: ¿dónde está la plata?”, señalaron desde ATE.

La crítica alcanza directamente a las autoridades de la Agencia: la presidenta Natalia Avendaño, la directora del FONCyT Rita Cuevas y los integrantes del directorio Luis Martín Gómez de Liguori y Verónica Andrea Vaccalluzzo. Según el gremio, ninguno de ellos recibió hasta ahora a los trabajadores para discutir la situación.

En paralelo, se recordó que en la actualidad la inversión en ciencia representa apenas 0,15% del PBI, una cifra menor incluso a la registrada durante la crisis de 2002. “No se trata de falta de presupuesto, sino de una decisión política de no ejecutar los fondos”, cuestionaron los investigadores.
“La ciencia argentina se apaga frente a la indiferencia de sus autoridades. No vamos a quedarnos callados. Porque sin ciencia no hay futuro y sin becarios ni subsidios no hay ciencia”, advirtieron los manifestantes, que mantendrán la ocupación hasta obtener una respuesta oficial.