Amenaza de Roberti y conciliación obligatoria

La Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustible, uno de los mayores sindicatos de petróleo del país inició en la jornada de ayer una huelga de 48 horas, que se extiendería hasta el final del día de hoy debido a una disputa con el Ministerio de Trabajo de la Nación, que había intervenido en el proceso electoral de autoridades de una seccional del gremio.

La protesta, encabezada por Alberto Roberti, secretario general de la Federación y diputado nacional por el Frente Renovador, que ya afectaba la producción de crudo y gas en todo el país, de acuerdo con un comunicado de la Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles, tuvo que ser abortada.

Es que el Ministerio de trabajo dictó la conciliación obligatoria, por lo que habrá un compás de 15 días para negociar una salida sin medidas de fuerza.

El paro petrolero estába «orientada a que el Ministerio de Trabajo rectifique injerencias y decisiones que afectan derechos de los trabajadores del sector», señaló el secretario general del sindicato, Alberto Roberti, en el comunicado.

Como el paro tenía lugar tras un fin de semana largo, tenía un impacto más relevante sobre la actividad. Además, en un reportaje, en Radio La Red, Roberti advirtió con profundizar la medida de fuerza.

«Esperemos no llegar a desabastecer a la gente, pero si no hay respuesta del Gobierno, habrá paro de 72 horas la semana que viene», amenazó el sindicalista.

Lo que el sindicato le reclama al Gobierno no es por salarios: es que reconozca los resultados de las elecciones internas del 14 de noviembre en el Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Cuyo.

Según la versión de Roberti en esas elecciones, la lista encabezada por David Castro, aliado del titular del gremio y diputado nacional de Frente Renovador, se impuso a la del legislador kirchnerista Dante González, que ponía en juego su reelección.

En medio de denuncias cruzadas, la elección favoreció a la liderada por Castro, que se impuso por más de 2.000 votos, pero la junta electoral, dominada por el oficialismo, decidió anular la votación y exigió que los comicios se hagan nuevamente.

Sin embargo, desde el sector de Gonzalez denunciaron que los aliados de Roberti robaron una urna, que hicieron desaparecer y que había hecho llegar para los comicios a una patota desde la Capital para «asegurarse» la victoria.

El paro de 48 horas comprende al personal de yacimientos, refinerías y plantas de todo el país, excepto la región patagónica que hace tiempo decidió abandonar las filas del diputado massista y armar su propio recorrido.