Un jabonoso Claudio Aquino le entregó una nueva certificación de autoridades a Voytenco pero horas después le declaró ilegal el Congreso y lo empujó a una crisis institucional

Claudio Aquino el hombre fuerte de la estratégica Dirección Nacional de Asociaciones Sindicales hizo un curioso doble juego. Primero le otorgó una nueva certificación de autoridades a la UATRE, que pareció fortalecer la conducción de José Voytenco en el medio de su interna. Horas después le declaró ilegal el Congreso gremial y lo empujó a una crisis institucional. Sospechas por la modalidad de la toma de decisiones.

Claudio Aquino, el Director de la estratégica Dirección Nacional de Asociaciones Sindicales (DNAS) hizo un curioso doble juego que, en cuestión de horas, pasó de fortalecer una conducción a debilitarla. De hecho, la situación evidenció el poder y la discrecionalidad en la toma de decisiones del funcionario que parece jugar sin control «de arriba» en los conflictos sindicales.

Primero le otorgó a José Voytenco, el líder de los peones rurales, una nueva certificación de autoridades. En la práctica avaló el corrimiento de cargos que pidió el dirigente tras la salida de algunos de los integrantes de su Comisión Directiva en medio de su pelea intestina. El escrito, que fue celebrado en las redes sociales de la UATRE parecía ser un empujón decisivo en la interna que transita la organización por estas horas y que ya tuvo varios capítulos.

Sin embargo, apenas horas después el mismo Aquino sacó una definición en sentido contrario. Es que rechazó un recurso de reconsideración presentado por el mismo Voytenco y ratificó que el Congreso que lideró en Puerto Madryn a fines de noviembre no tiene validez legal.

Aquino usó como base un informe de la dirección jurídica de Trabajo que aseguró que el gremio no presentó material que revierta la resolución inicial tomada por la DNAS que lo había suspendido de forma preventiva. «No ha aportado elemento alguno», explica textualmente el escrito al que accedió InfoGremiales. La determinación sobre el Congreso Anual Ordinario se había tomado porque al momento de la convocatoria existían casi dos decenas de elecciones de seccionales sin resolverse, en la práctica con trámites de impugnación sin saldar, por lo tanto no habían podido acreditarse la legalidad y la legitimidad de los congresales citados.

Un jabonoso Claudio Aquino le entregó una nueva certificación de autoridades a Voytenco pero horas después le declaró ilegal el Congreso y lo empujó a una crisis institucional

Esta segunda decisión de Aquino empuja a una crisis institucional del gremio que tiene a la oposición cuestionando a Voytenco por el manejo de los recursos tanto del gremio como de la intervenida obra social sindical (OSPRERA) y que hasta pidió formalmente la intervención de la organización sindical.

De hecho un conjunto de seccionales opositoras elevaron un pedido a la Secretaría de Trabajo denunciando a Voytenco y su ejercicio sin control ministerial implican «serios perjuicios a la asociación sindical y/o a sus miembros» por lo que señalaron que «se encuentra inhibido y no está en aptitud de administrar el patrimonio de la entidad conforme actuaciones judiciales».

Los dirigentes hacen eje en la investigación que le siguen al sindicalista por enriquecimiento ilícito y lavado de activos que promovió un dirigente platense del sindicato y que ahora recayó en Comodoro Py, un lugar de clara disputa de operadores.

La DNAS es una de las áreas más sensibles de la Secretaría de Trabajo, por la que ya han pasado varios funcionarios y sobre la que pesa la sospecha bien fundada de manejos poco claros en lo que tiene que ver con los trámites requeridos por los gremios para poder funcionar normalmente. De hecho quien fuera su número dos, Martín Aguirre, fue desplazado hace apenas algunas semanas por suspicacias en el tratamiento de los expedientes.