«Hay una policía de pensamiento», dijo el juez perseguido por homologar la paritaria bancaria
El juez de la Cámara de Apelaciones de Trabajo, Enrique Arias Gilbert, consideró que los fallos de un juez “no pueden ser motivo de denuncia” por parte del Poder Ejecutivo porque se estaría poniendo en riesgo “la división de poderes”, y sostuvo que en sus 28 años de magistrado dictó resoluciones que “no le gustaron al gobierno de Menem, ni al de De la Rúa, ni al de Duhalde, ni al de Kirchner”.
En referencia a la denuncia presentada ayer por el ministerio de Trabajo en contra suyo y de la jueza Graciela Marino por “mal desempeño”, Arias Gilbert expresó que “los jueces no pueden ser juzgados por su sentencias, porque pueden producir la desaparición de la división de poderes. Una opinión de un juez, expresada en un fallo, no puede ser motivo de denuncia. Si se sanciona a las personas por o...