Personal de Tránsito reclama a Larreta aumento de emergencia y apertura de paritarias

Desde ATE Cuerpo de Tránsito exigieron al gobierno de la Ciudad de Buenos Aires una serie de reclamos que incluyen desde un aumento salarial hasta un cese a los maltratos que sufren las y los trabajadores desde los puestos jerárquicos. La mayoría de las trabajadoras son mujeres con hijos a cargo.

Desde ATE informaron que las negociaciones entre el sindicato y el gobierno de la Ciudad no empezaron porque la gestión de Horacio Rodríguez Larreta no convoca a la Comisión Negociadora Central que solicitó audiencia formal el 4 de febrero pasado.

El pedido principal es un aumento salarial de emergencia y la inmediata apertura de paritarias ya que los salarios de las y los trabajadores porteños quedaron muy retrasados respecto a la inflación.

Pero esto no es todo. En sus redes sociales, ATE Cuerpo de Tránsito expone otras graves situaciones respecto a las condiciones laborales. Denunciaron falta de ropa de trabajo adecuada, falta de medidas de seguridad, persecución, malos tratos desde los cargos jerárquicos, le negación al derecho a desconexión, entre otros.

A esto se suma el incumplimiento de acuerdos previos. Tal es el caso de pago del bono de transitorias o el envío de contratos a los agentes de Locación de Obras y Servicios (LOyS).

Las y los trabajadores del Cuerpo de Agente de Tránsito lleva años reclamando por la precariedad laboral a la que están sometidos desde el propio gobierno de la Ciudad.

A principios de 2020 unos 80 agentes de tránsito habían sido despedidos por el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. Era una determinación que recaía especialmente en aquellos que habían liderado las protestas por la muerte de su compañera Cinthia Choque meses antes. A pesar de que habían obtenido una cautelar para que Larreta los reponga en su puesto de trabajo, no se había cumplido.

El episodio que llevó a la muerte a Choque en septiembre de 2019 había visibilizado, adicionalmente, todo un entramado de precarización laboral que los tenía como monotributistas, sin cobertura de riesgos del trabajo y con salarios por debajo de la línea de pobreza.