Para Correa, la Obra Social de los Azucareros se usó para financiar a dirigentes de Cambiemos y anticipó: «Leguizamón seguramente tendrá problemas judiciales»

El flamante titular de la Obra Social de los Azucareros, Juan Correa, habló de los manejos irregulares que ya comprobaron en la intervención macrista que comandó José Leguizamón. Advirtió que se utilizó para financiar a dirigentes tucumanos de Cambiemos y anticipó que habrá más denuncias penales: «Leguizamón seguramente tendrá problemas judiciales».

El titular de la Obra Social del Personal de la Industria Azucarera (OSPIA), Juan Correa, se refirió a la realidad compleja que encontraron en la institución luego de la intervención que dictó el macrismo y que duró hasta el 29 de abril pasado.

«En la farmacia, por ejemplo, nos encontramos con deudas, que la auditoría está viendo, de 18 millones de pesos con un proveedor y 7 millones con otro» abrió Correa, también secretario General de la Federación de Empleados de la Industria Azucarera (FEIA).

«Nos parece muy extraño que no haya ni convenios ni contratos con ningún proveedor de la Obra Social», sostuvo el dirigente en declaraciones a InfoGremiales en uno de los viajes que realizó a Buenos Aires para presentar documentación ante la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS).

Y precisó: «Cuando llegamos no encontramos libro de actas, ni actas volante, ni nada. No tenemos documentación de nada de lo que se hizo en la gestión de Leguizamón».

José Leguizamón fue el interventor designado en épocas de Cambiemos al frente de la OSPIA. La sobrevida de «Pita», como le dicen a Leguizamón en Tucumán, hizo que su paso por la institución dure 4 años hasta el pasado 29 de abril.

«Estamos poniendo en orden los prestadores, no le hemos cortado el servicio a nadie, pero estamos viendo como reducir los costos», remarcó Correa.

Y aseguró: «Hubo manejos irregulares, está claro. En discapacidad hay denuncias de los mismos profesionales entre ellos». Correa se refiere, concretamente, a las acusaciones de los propios profesionales contratados por la OSPIA que describen un mecanismo aceitado para favorecer a ciertos transportistas y que éstos, a su vez, sobrefacturen el servicio en perjuicio de la Obra Social.

«Leguizamón seguramente tendrá problemas judiciales. Va a haber denuncias penales por las irregularidades», apuntó Correa. El gremialista está a la espera del resultado de una auditoría que se está realizando sobre los 4 años de gestión Leguizamón. Ya hay algunas conclusiones preliminares, pero se esperan conclusiones globales.

«Se han llevado hasta las contraseñas de las redes sociales y desde las mismas se dedican a efectuar falsas denuncias, acusar con falsedades a mi consejo directivo y pedir que ‘vuelva’ Leguizamón.  Curiosamente esas contraseñas creemos que las tenía el hijo, con lo cual con la denuncia ante la justicia penal podremos ver de que direcciones ip vienen esas publicaciones», añadió.

Para el dirigente los problemas no fueron sólo locales: «Con la Superintendencia de Servicios de Salud algo ha pasado. No puedo entender el descontrol que había. Yo tengo que cumplir con todo lo que me están pidiendo y antes no había control».

Correa también puso el ojo en la utilización de la organización de los azucareros con tintes políticos partidarios: «Se usó para financiar dirigentes de Cambiemos. Hay un audio que está en la Justicia en el que (Leguizamón) nombra a José Canó y Silvia de Perez. Él tenía relación directa».

Por último habló del futuro de la OSPIA y de la chance de ampliar la cobertura: «Tenemos el proyecto de llevar la Obra Social a Salta. Ya tenemos los dos gremios de allá que se han adherido a la FEIA, los del Ingenio Tabacal y San Isidro. Creemos que nos va a llevar 3 o 4 meses ordenar bien la obra social y de allí nos vamos a Salta».