Los gremios que componen la CGT Córdoba expresaron vocación de unidad y rechazaron la intervención: «Se resolvió designar a la representación de la central para integrar la Comisión Normalizadora»

En el Plenario realizado en la Casa Histórica -donde se gestó el Cordobazo-, la semana pasada, la representación de la mayoría de las setenta y dos organizaciones que la integran, la CGT Regional Córdoba debatió el proceso de normalización que se activó desde la Secretaría del Interior de la CGT nacional. Resolvieron rechazar la intervención y ratificaron su conducción aunque se dispusieron a elegir integrantes de la Comisión Normalizadora. «No hay ninguna negativa a que se sumen otras organizaciones. Lo único que exigieron es que no se desconozca lo realizado ni a la conducción que lleva adelante este trabajo.«

La normalización llega de la mano de Horacio Otero, designado por la UOM de Antonio Caló y ratificado por Abel Furlán para desempeñar esa tarea en la CGT nacional: «Hacen ya más de once años que la CGT local funciona con sus autoridades elegidas democrática y unánimemente, con la realización de innumerables acciones gremiales y movilizaciones desde entonces; además de haber aprobado sus memorias y balances en plenarios llevados adelante con convocatoria y fiscalización de los funcionarios de la Delegación cordobesa del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación.», detallaron desde la regional cordobesa.

«Un detalle muy importante es que la UOM Córdoba no integra hoy la CGT Regional Córdoba, como tampoco las representaciones de Comercio, SURRBAC ni Luz y Fuerza, todas aspirantes a integrar la conducción futura.«, señalaron.

Horacio Otero con Abel Furlán, que lo ratificó al frente de la Coordinación Nacional de la CGT

En la reunión, donde se expresaron la mayoría de los presentes, se ratificó la voluntad de unidad del movimiento obrero de Córdoba y se resolvió designar a la representación de la central para integrar la Comisión Normalizadora, que se reunirá oportunamente con el otro sector.

Al mismo tiempo, se ratificó la conducción que hoy ejerce el Secretario General del Sindicato de Empleados Públicos, José Pihen quien sucedió en el 2015 al entonces Secretario General de la CGT Regional Córdoba y del SMATA, Omar Dragún.

La paulatina y constante incorporación de sindicatos a la CGT cordobesa, le fue dando el carácter de mayoritaria, siendo hoy lo más representativo del movimiento obrero local. Las acciones llevadas adelante, en su gran mayoría movilizaciones reclamando por derechos, defensa de las fuentes de trabajo, precarización y flexibilización laboral en todos los ámbitos -tanto públicos como privados-, modificaciones a la ley jubilatoria provincial, etc. han sido realizadas en forma conjunta con las otras CGT de la provincia de Córdoba, como Río Cuarto, Villa María, San Francisco, Cruz del Eje, Bell Ville y Tercero Arriba – Calamuchita.

Los presentes también recordaron que la CGT Regional Córdoba no surgió de la nada, sino que “hace 11 años se llegó a un acuerdo unitario, que fue el resultado de un trabajo paciente, esforzado, desinteresado, de años, de compañeras y compañeros que se dispusieron a plantar una CGT en Córdoba, para intentar superar, una vez más, la larga historia de divisiones que tiene el movimiento obrero local”, fue la expresión de uno de los representantes.

Desde la regional aseguraron que la participación de las organizaciones sindicales que la integran hoy, ha sido permanente a través de esos años, en que fueron elegidas sus autoridades y cada compañera o compañero desempeña responsablemente un rol dentro de las secretarías.

Otra de las y los presentes se expresó recordando parte de la historia: “ Es importante referir que desde el año 2003 varios dirigentes se dispusieron a trabajar para obtener esa anhelada unidad que nos permitiera estar a la altura de las circunstancias en la representación de la clase trabajadora cordobesa -como ejemplo, en el 2004 fuimos parte de la expresión No al ALCA en las calles-. En el 2006 se elaboró un programa y pudimos tener una conducción que reflejó los acuerdos en un “triunvirato” que en ese entonces significó un avance que dio sus frutos en el 2011, cuando los compañeros Omar Dragún y José Pihen llegaron a conducir esta CGT, renovando la conducción en el 2015 donde asume el compañero José Pihen como secretario general”.

“Desde ese acuerdo y hasta hoy, no hubo ninguna circunstancia que afectara a las y los trabajadores, que no nos tuviera presente en las calles, movilizados, con actos, documentos, gestiones y fundamentalmente solidarios activamente ante los conflictos”.

“Esta CGT mantuvo en condiciones la casa de calle Chacabuco, sin deudas ni problemas de ninguna índole; y pudo recuperar la Casa de la Historia del Movimiento Obrero de Córdoba, junto con la memoria y la verdad sobre la gesta del Cordobazo, declarado Día de las Luchas Populares por una ley cuyo proyecto presentara el compañero José Pihen. Esa historia quedó plasmada en libros editados sobre esas luchas y sus principales protagonistas, contando con el invalorable testimonio de Lucio Garzón Maceda”.

“Esta CGT ha incorporado a las compañeras en igualdad de condiciones a todas las actividades y acciones y ha promovido la capacitación y formación tanto sindical como en igualdad de género; creó una Comisión de Solidaridad que está presente -a través del aporte de los sindicatos- en lugares donde los comedores y merenderos son la realidad que permite a muchas y muchos cordobeses satisfacer la necesidad alimentaria; ha reconocido desde siempre la existencia de la economía social o popular, constituida por miles de trabajadores que acceden al sustento diario mediante múltiples tareas sostenidas en la informalidad y sin acceso a derechos básicos. Por eso creó la Secretaría de la Economía Popular, hoy a cargo del compañero de la Unión Obrera Ladrillera”.

Por último, el Plenario ratificó que la unidad es lo que esta CGT ha buscado siempre, entendiendo que no comienza la historia cuando alguien llega, sino que continúa para fortalecerse con las nuevas integraciones.

De esta forma ratificaron que no hay ninguna negativa a que se sumen otras organizaciones que lo decidan. Lo único que exigieron es que no se desconozca lo realizado ni a la conducción que lleva adelante este trabajo.