La Justicia golpeó al tándem Genta – Amor y pone en jaque uno de los focos de poder porteños más sólidos desde el regreso de la democracia

La Justicia declaró nulas las elecciones con las que Amadeo Genta fue reelecto hasta 2025 secundado por quien sería su sucesor, Alejandro Amor. Además puso un plazo de 15 días para que vuelvan a realizarse los comicios. El del SUTECBA es uno de los poderes porteños más estables desde el regreso de la democracia.

Amadeo Genta, el titular del Sindicato Único de Trabajadores del Estado de la Ciudad de Buenos Aires (SUTECBA), tuvo ayer un revés de peso. Es que el Juzgado Nacional de Primero Instancia del Trabajo declaró nulas las elecciones con la que fue reelecto hasta 2025.

Se trata de las elecciones que se realizaron el 26 de noviembre de 2021 y que venían siendo denunciados por los opositores por una serie de irregularidades.

La jueza Stella Maris Vulcano, que hizo lugar a un presentación promovida por el opositor Carlos «Chapita» Elías, le concedieron a la Junta Electoral 15 días para volver a realizar los comicios «con la participación de la Lista Celeste y la Lista Movimiento Unificado Azul y Blanco, bajo apercibimiento de una multa diaria».

La Justicia golpeó al tándem Genta - Amor y pone en jaque uno de los focos de poder porteños más sólidos desde el regreso de la democracia

Además Vulcano designó a la Secretaria de Trabajo, Empleo y Seguridad Social –perteneciente al
Ministerio de Capital Humano- para «ejercer el contralor de los actos preparatorios y el acto eleccionario ordenado en esta sentencia en el plazo de este pronunciamiento y a la luz del Estatuto del SUTECBA, dando cumplimiento con dicho control mediante informe…».

El SUTECBA, que representa a los municipales porteños, es uno de los focos de poder más estables de la Ciudad de Buenos Aires. De buen trato con las diferentes gestiones, se convirtió en una especie de anexo de poder del PRO y logró surfear de esa manera las últimas dos décadas.

La particularidad de los comicios de 2021, ahora cuestionados, es que eran los primeros en los que Genta, que controla la organización desde el regreso de la democracia en 1983, parecía haber definido su sucesión. Eligió a Alejandro Amor como su número dos con la perspectiva de que sea su heredero en el futuro cercano.