#ESPECIAL Reducción de la jornada laboral: Del Caño propone «6 horas, 5 días a la semana sin reducción del salario»

(Por Pablo Maradei) Nicolás Del Caño es diputado nacional y candidato a vicepresidente por el Frente de Izquierda y a su vez es autor de uno de los proyectos que propone la reducción laboral. Podés ver aquí su propuesta ya que la hizo llegar a InfoGremiales.

El tema laboral es medular en los espacios de las izquierdas tanto a nivel local como mundial. El malestar de los trabajadores por salarios bajos o negociaciones de convenios colectivos que no les suman beneficios tuvo su correlato en las fábricas donde la Izquierda conquistó comisiones obreras que hacen ruido interno a nivel gremial en algunos sindicatos peronistas. El mayor exponente es el caso del gremio del Neumático que conduce el trotskista Alejandro Crespo que le arrebató la conducción nacional a Pedro Wasiejko, un dirigente de la CTA.

En su proyecto restringe propone las 30 horas laborales semanales con igual remuneración a la que perciben hoy y que las horas liberadas sean ocupadas por trabajadores nuevos.

Aquí el ida y vuelta con este medio:

– ¿De qué va tu proyecto?

– Hemos propuesto la reducción de la jornada a 6 horas a 5 días a la semana sin reducción del salario. Es un proyecto que busca, por un lado, la posibilidad de que aquellos que tienen una jornada de 8 o más horas puedan tener tiempo libre para dedicarlo a la familia, al arte, al deporte, la educación y la cultura. Nosotros no planteamos ningún tipo de cláusula de flexibilización como se han fijado en países vecinos como Chile donde se ha avanzado en la creación de bancos de hora donde las empresas pueden disponer cómo se arma la semana laboral. Por otro lado, lo que busca nuestro proyecto es repartir las horas de trabajo; que esas horas liberadas puedan ser ocupadas por trabajadores y trabajadoras informales o que están desocupados o que perciben planes sociales. Hoy tenés en la Argentina una cantidad enorme de informalidad laboral y esto permitiría si se aplicase a las grandes empresas generar un millón doscientos mil puestos de trabajo. 

– En el Coloquio de IDEA, Gerardo Martínez planteó que no es momento de debatir esto ahora porque muchos empresarios se van a terminar radicando en Brasil; y desde Juntos por el Cambio dicen que esto no va a generar trabajo nuevo, sino que el empleador optará por pagar horas extras al mismo trabajador o negrear con franqueros…

– Si bien hablamos de los trabajadores y sus derechos también hay que decir que la semana laboral en la Argentina es una de las más extensas y la ley tiene casi 100 años; y la productividad se ha multiplicado ya que las empresas son las que se han llevado esos beneficios en más ganancias y eso no redunda en un bienestar para el trabajador. También cuando se conquistaron las 10 horas decían que la ganancia se hacía en la hora 11. Siempre se van a estar diciendo que no es el momento; un representante de la Unión Industrial Argentina dijo para qué los trabajadores quieren estar fuera del trabajo; si el trabajo era su ámbito natural. Bueno hay muchas cosas para hacer fuera del trabajo. 

#ESPECIAL Reducción de la jornada laboral: Del Caño propone "6 horas, 5 días a la semana sin reducción del salario"

– ¿Cómo ves posicionada a la CGT respecto a este tema?

– Nosotros somos muy críticos de las conducciones sindicales porque han dejado pasar los ajustes brutales que hemos visto en estos años. La CGT en general tiene una postura conservadora de no abordar esta discusión; inclusive más allá de que alguno pueda tener una declaración favorable, hay que tener cuidado de que no implique el avance en cláusulas de flexibilización laboral como se dio en Toyota donde empresarios y dirigentes sindicales las avalaron para que se trabaje los sábados. Eso hay que alertarlo. En ese sentido estamos frente a una demanda justa, pero que puede traer aparejado por parte de empresarios y sindicalistas cómplice que concedan flexibilizaciones. Sin ir más lejos, lo que se vio en Chile cuando se negoció con la derecha cláusulas de flexibilización que ni siquiera se habían visto con Pinochet. Hay que tener cuidado para que no termine siendo gato por liebre; y eso es lo que hay mirar de los sindicalistas porque son cómplices, tanto de este gobierno como del anterior, de la transferencia de 100 mil millones de dólares de los bolsillos de los asalariados al gran capital concentrado. Entonces no me extraña que pueda haber concesiones de esas características. 

– Si descartás a la CGT y a los sindicatos en general, ¿cómo se implementaría?

– Esto es una lucha de los trabajadores. La jornada laboral ha sido uno de los principales conflictos entre el capital y el trabajo en Argentina y en el mundo; y por lo tanto es una lucha de los trabajadores. Y ahí incorporo algo que nosotros planteamos en el proyecto que es la creación de comisiones obreras para garantizar que se lleve adelante esta medida y que el empresario no contrate en negro o se le pague horas extras al que ya trabaja. Es obvio que los empresarios no van a decir: ´bueno lo vamos a hacer´; acá estamos hablando de una organización y de una lucha desde abajo. Este proyecto debe ser una gran bandera de lucha que te permita unificar lo que la conducción sindical ha dividido a lo largo de todos estos años entre los efectivos, informales, monotributistas y contratados; ha habido una fragmentación enorme durante todos estos años. La precarización ha avanzado muchísimo. 

– Esta discusión de la jornada laboral no tendría que ser una discusión en el marco de la discusión por convenio entre sindicato y empresarios…

Yo creo que discutir convenio por convenio facilita las cláusulas de flexibilización como en el caso de Toyota; además de favorecer a una lucha totalmente fragmentada de los trabajadores y el corporativismo de que cada uno pelee por lo suyo. Los informales no tienen derecho a un montón de derechos y la dirigencia sindical ha cumplido un rol en eso y ha traicionado como está acostumbrado a hacerlo. Por todo esto muchos votaron a Milei, por la bronca y ahí hay una responsabilidad del sindicalismo. Por eso, establecer una ley general te permite un piso y después en todo caso en la discusión por convenios avanzar aún más. Limitar la jornada a través de una ley te da más chances de ganar en las condiciones de vida para los trabajadores que hacerlo sector por sector porque el más débil va a tener más complicaciones que aquel que tiene mayor poder de fuego. 

Claramente estamos frente a una medida electoralista de campaña, ustedes quedarían pegados al oficialismo o no es un tema que les importe…

Más allá del uso que quiera hacer el Gobierno, nosotros fuimos los primeros que hemos planteado hace años la reducción de la jornada laboral; como fue con Ganancias; desde la Izquierda sostuvimos eliminar la cuarta categoría. En definitiva, los trabajadores no comen vidrio, saben que hay un uso electoral, pero saben que hay una demanda. Saben que el Gobierno no es bueno, sino que hubo un planteo de hace muchos años y en ese sentido la reducción de la jornada es una lucha de los trabajadores.

El proyecto:

4782-D-2022