En medio de una interna del Sindicato de la Carne, cerró el frigorífico ArreBeef, echó 1.000 empleados y amenaza con no pagar indemnizaciones

El anuncio se realizó el viernes en el marco de un paro por tiempo indeterminado. De fondo una disputa por la representación del Sindicato de los Trabajadores de Carne de la Zona Norte de Luis Pérez. Silencio de la Federación. Mil empleos en juego y amenaza de no pagar las indemnizaciones.

Hugo Borrell, el dueño del frigorífico Arrebeef ubicado en la localidad de Pérez Millán, provincia de Buenos Aires, anunció el cierre definitivo de la planta y el despido de 1.000 empleados.

Sucedió el viernes en medio de un conflicto gremial que lleva varios días con el cese de trabajo y la toma de la planta ubicada en esa localidad del partido de Ramallo.

De fondo se transita una situación sindical compleja. En los últimos meses un grupo de trabajadores comenzó a disputar la representación gremial al delegado del Sindicato de los Trabajadores de Carne de la Zona Norte del territorio bonaerense, Luis Pérez.

Los trabajadores buscaban modificar la representación gremial y acusaban a Pérez de trabar la situación, en el marco de la suspensión de elecciones gremiales por la emergencia sanitaria.

Muchos de los empleados de ArreBeef, incluso, se manifestaron frente a la sede del Sindicato de Trabajadores de la Carne para pedir la renuncia del gremialista y la realización de elecciones.

Además, los trabajadores pedían mejoras salariales y el pago del salario por quincena según el convenio. Ante dicha situación, comenzaron un paro por tiempo indeterminado.

En ese marco, Borrell anunció que la firma cerraba las puertas de la fuente laboral que afecta a 1.000 trabajadores y que desarrollaba una faena diaria de 1.500 cabezas.

El gremio en cuestión está enrolado en la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne y sus Derivados que conduce desde hace años José Alberto «Beto» Fantini.

InfoGremiales trató de comunicarse con Fantini para poner que pueda dar su visión del conflicto pero no consiguió respuestas.

Ahora, los mil empleaos de Arrebeef mantienen la permanencia en el lugar y esperan algún tipo de salida.

Por si fuera poco, Borrell amenaza con no pagar si quiera las indemnizaciones: «Mis deudas las voy a pagar todas; ellos (por los trabajadores en conflicto) están en conciliación obligatoria y sé quiénes son a los que no le voy a pagar la indemnización, porque, al estar en conciliación obligatoria, deberían haber estado trabajando”, le dijo a Infobae.