Paritarias: los que arreglaron y los que no

Las cinco organizaciones que participaron de una conferencia de prensa el 20 de mayo en Casa Rosada y ya dejaron las paritarias detrás concentran un gran peso político, y le dan aire al gobierno de cara al paro del 9 de junio. La Unión Obrera Metalúrgica (UOM), el Sindicato de Empleados de Comercio, la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN), la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) y el Sindicato Único de Trabajadores de Edificio de Renta y Horizontal (SUTERH) firmaron el mismo día paritarias cercanas, en promedio, al 27%.

Este es el porcentaje que buscaba el Gobierno, que no quiere un alza mayor por temor a que los empresarios intenten aumentar luego los precios. Pero todavía restan paritarias clave que no cejan en su demanda de un piso del 30%. Como las paritarias de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), la Asociación Bancaria (que viene de un paro de 48 horas), la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros y la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA), que no está legitimado por sus trabajadores, entre otras.

Pero, más allá de si el aumento incluye o no sumas adicionales al básico que alterna el porcentaje, de lo que se trata más bien es de si la rama de actividad tiene las espaldas para brindar aumentos con su productividad.

Tal, por caso, el ejemplo de los aceiteros quienes tuvieron un acuerdo reciente que, junto a subas no remunerativas, alcanza el 36%. Esto lo consiguieron tras intensas medidas de fuerza que paralizaron las operaciones en los más importantes puertos graneros del país.

También pasaron “la barrera del 30%” gremios como la Federación Obrera Nacional de la Industria del Vestido y Afines (FONIVA) que firmó un 30,5% y la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne y sus Derivados, que llegó a una recomposición salarial del 31,5 por ciento en tres tramos.