Gracias a una ocupación pacífica del edificio, los trabajadores estatales nucleados en ATE consiguieron que Juan José Aranguren revierta el despido de 140 empleados del Ministerio de Energía.
El ex presidente de Shell se había comprometido en agosto del año pasado a garantizar los puestos de trabajo del call center para denunciar cortes de luz y a mejorar el sistema de contratación por medio de la ley marco.
Sin embargo, pretendieron incumplir su acuerdo firmado el subsecretario de Coordinación Administrativa de Energía, Marcelo Blanco, y el Director Nacional de Coordinación Interministerial del Ministerio de Modernización, Gonzalo Diaz.
En la mañana de ayer los funcionarios le informaron al gremio la intención de despedir a 140 empleados por el cierre de la unidad. Luego de recibir insultos de los representantes del Poder Ejecutivo, los empleados realizaron una toma pacífica del edificio en Paseo Colón 171.
Por la masividad de la medida, los trabajadores consiguieron que el Gobierno no ordene un desalojo de la Policía, como había amenazado, y que revierta los despidos. “Ya se levantó la medida de fuerza y podemos decir que le torcimos el brazo al ministro Aranguren”, comunicaron oficialmente desde ATE Capital.
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