Trabajadores de la cultura piden a Larreta que deje de gastar millones en máquinas de snacks y ofrezca soluciones

El mundo de la cultura sostiene el 11% del PBI de la ciudad más rica del país que en el contexto de la pandemia encuentra todas sus actividades y espacios paralizados. Reclaman «decisión política» para que el gobierno encabezado por Horacio Rodríguez Larreta y el ministerio de Cultura en manos de Enrique Avogadro les ofrezcan soluciones concretas.

Sus trabajadores pertenecen a uno de los sectores más afectados por la pandemia y, entre ellos, quienes posiblemente lleven la parte más relegada sean quienes se despliegan en el mundo de la danza. Se agruparon el Frente de Emergencia de la Danza y lanzaron una campaña «ante la ausencia de respuestas y la falta de acciones frente a un pedido de plan de emergencia cultural para el sector y un aumento de presupuesto de Prodanza  para el 2021», explicaron.

En un comunicado en video detallan la gravedad de su situación y exponen punto por punto las falencias del gobierno porteño frente a un sector productivo sin resto: «Luego de haber tenido 10 reuniones consecutivas con el Ministerio de Cultura de CABA y el Directorio de PRODANZA y a 5 meses de la declaración de emergencia del sector (el Frente de Emergencia de la Danza) informa que el Ministerio»:

No presentó ningún programa ni línea de subsidios específica ni créditos ante la emergencia. 

No tuvo en cuenta el contexto y la convocatoria PRODANZA 2020 sólo contó con las líneas habituales de fondos con lógicas concursables para la creación de obras que no se pueden realizar y funcionamiento de salas que no pueden funcionar.

No encontró una solución para los estudios de danza. 

No realizó un relevamiento que refleje el crecimiento y la diversidad del trabajo del sector y no publicó el realizado por PRODANZA a personas físicas, evidenciando la falta de un plan estratégico de elaboración y diseño de políticas públicas para la danza.

No presentó ningún tipo de ayuda para adecuar los espacios de danza independiente a los protocolos aprobados para actividades sin público.

No diseñó ningún plan de contrataciones para generar fuentes de trabajo para artistas de la danza.

Y NO garantiza un presupuesto 2021 acorde a las necesidades del sector, aún reconociendo la inequidad y la impactante desigualdad histórica respecto de los otros institutos pertenecientes a impulso cultural.

Así mismo, en otro video de reclamo por las y los trabajadores de la cultura en general, expusieron algunos de los gastos al menos llamativos que se hacen en la ciudad de Buenos Aires, que absorben recursos hoy necesarios para sostener el tejido socioeconómico porteño. Específicamente pidieron que se deje de destinar dinero a máquinas de snacks en el Teatro San Martín y canchas de bowling en el edificio del Tiro Federal, como ocurrió en el mes de julio pasado. 

El reclamo resultó previo al tenso cruce por la coparticipación que derivó en que el presidente de la Nación contara en una entrevista en Radio con Vos que el intendente de Alte. Brown, Mariano Cascallares, le confesó que el presupuesto con el que cuenta «es igual a la cantidad de dinero que la Ciudad de Buenos Aires le destina al arreglo de veredas» y validó la comparación puesto que ambas localidades tienen más o menos la misma cantidad de habitantes y la misma cantidad de territorio. «La Ciudad tienen muchísimos lugares donde puede corregir gastos que pueden esperar», señaló Alberto Fernández.