Perfiles técnicos, fuerte ascendencia de Massa y poca incidencia gremial, en el rompecabezas que arma Moroni

Apenas unas horas después de que formalmente Trabajo volviera a ser ministerio, se empezaron a conocer los nombres de los funcionarios que se ubicarían en los cargos claves de la gestión de Claudio Moroni. Aunque todavía faltan los cierres de último momento y todavía hay negociaciones, se filtraron tres de los nombres que esperaba conocer todo el ámbito sindical.

El primer lugar en confirmarse fue el del secretario de Trabajo, cargo clave y que estaba siendo buscado por distintos actores del mundo gremial. Finalmente el que tiene todos los números para asumir ese lugar es un tapado: Leonardo Di Pietro Paolo, un hombre con pasado en la gestión pública pero que no estaba en la órbita de quienes disputaban el espacio.

Otro que parece haberse asegurado un espacio es el diputado nacional por el Frente Renovador, Raúl Pérez. Concretamente al massista le quedaría en su poder la Secretaría de Empleo, otro raviol clave por su poder de articular política territorial y repartir fondos para capacticación.

La noticia no fue del todo bien recibida por la CGT ya que esperaba alguien más cercano para ese rol y tampoco por algunos gobernadores, que también suelen articular políticas sociales con ese financiemiento.

Por último también se confirmó un dato que causó sorpresa. Es que en la Dirección Nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo seguirá en su cargo la abogada Gabriela Marcelló. Si bien se trata de un perfil más bien técnico, se descontaba que no iba a haber continuidades con la gestión de Dante Sica.