Más conflicto en la Línea 60

Cerca de las 8 y en medio de un importante operativo de Gendarmería y Policía Federal, los choferes llegaron a la colectora y subieron el terraplén hasta la traza principal, donde bloquean el tránsito mano a la Capital Federal con la excepción de un carril que permanece habilitado.

Los manifestantes se oponen a la decisión de la jueza María Romilda Servini de Cubría que ordenó verificar 35 unidades ante el peligro que salgan a circulación sin estar chequeadas.

En ese marco, otro grupo de trabajadores se concentra desde las 5 en la cabecera porteña ubicada en la calle Guanahani al 200, en el barrio de Constitución, para impedir que la Justicia se lleve las unidades.

El conflicto entre la empresa Monsa y los trabajadores comenzó el jueves 25 de junio cuando los choferes decidieron no cobrar boleto en reclamo de la reincorporación de uno de sus compañeros que, según ellos, fue echado sin motivos.

Un día después, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria y ordenó a la empresa reincorporarlo, pero cuando el empleado se presentó a trabajar le prohibieron la entrada y además enviaron 50 telegramas más de despido lo que agravó la situación.

Más conflicto en la Linea 60

Los letrados radicaron en la jornada de ayer la denuncia luego de que «la empresa no dejara que los choferes saquen los colectivos a la calle», denunciaron los trabajadores.

El jueves pasado los empleados de la línea iniciaron una medida de fuerza para pedir la reincorporación de un despedido en la que trabajaban “como siempre, sólo que no se cobraba boleto”, indicó a Télam el delegado Hugo Schvartzman.

“Luego del despido injustificado de uno de nuestros compañeros decidimos realizar una medida de fuerza pero sin perjudicar al pasajero, por eso decidimos trabajar sin cobrar boleto. El viernes por la mañana el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por la que la empresa debía reincorporar a nuestro compañero y nosotros levantar la medida”, explicó el gremialista y representante de la Unión Tranviarios de Automotor (UTA).

Y continuó: “El sábado, cuando el trabajador que había sido despedido tenía que empezar a trabajar, no lo dejaron ingresar; entonces decidimos continuar con la medida de fuerza y la empresa decidió retirar a todo el resto del personal para que no podamos sacar las unidades”.

Schvartzman confirmó que “además, ese mismo sábado enviaron 47 telegramas de despido con el argumento de que el trabajador no cumplió con la conciliación obligatoria cuando son ellos los que no lo hicieron al no reincorporar a la persona despedida».

“Sabemos de buena fuente que se enviaron 50 telegramas de despido más que se entregarán el día de hoy (por ayer)”, aseguró el trabajador.

“Esto no es un paro, es un lock out de la patronal, los trabajadores estamos acá cumpliendo nuestra jornada laboral pero no tenemos ni las planillas ni las ordenes para salir por lo que no nos queda otra que quedarnos acá a esperar”, señaló.

Los trabajadores de la linea 60, la más utilizada por los pasajeros en el área metropolitana, se encuentran en los playones que la empresa Monsa tiene en Constitución, Escobar y Tigre.