Los gremios de alimentación pidieron un cambio de rumbo y advirtieron por «el permanente cierre de empresas»

«Resultan inaceptables los sucesivos aumentos en la pobreza que castigan principalmente a niños/as y sectores postergados así como el permanente cierre de empresas, los procedimientos preventivos de crisis, las suspensiones; los despidos, los adelantos de vacaciones y la pérdida del poder adquisitivo de los salarios», enfatizaron desde la Confederación que nuclea 15 Organizaciones Sindicales y representa a más de 1 millón de trabajadores y trabajadoras del sector alimentación.

Además explicaron que «el actual modelo económico impuesto desde el gobierno nacional ha llevado a la desintegración del sistema productivo, la caída del consumo, la falta de producción y la desprotección de la industria nacional frente al comercio internacional».

Desde la entidad que reúne a los trabajadores de la alimentación de todo el país alertaron que «las Obras Sociales Sindicales enfrentan una situación económica insostenible que pone al borde del colapso al sistema de salud. El desfinanciamiento producto por un lado de la caída en sus ingresos por la pobre actividad económica (despidos, caída salario real, morosidad elevada de las empresas) y por otro los sucesivos incrementos desmedidos en los precios de las prestaciones médicas y farmacéuticas son algunas de las graves dificultades que enfrentamos».

«Mientras a los trabajadores y trabajadoras se les exige un nuevo y mayor esfuerzo para enfrentar una crisis que no han generado y de la cual son ajenos a sus orígenes, vemos como se transfieren recursos desde los sectores productivos a los sectores financieros, que no puede más que esconder un claro objetivo especulativo y rentista de unos pocos actores de la economía», criticaron en el comunicado.

Asimismo, apoyaron «las iniciativas que en forma urgente e indispensable garanticen la alimentación a los sectores más vulnerables, comprometiendo nuestro apoyo y esfuerzo a estos objetivos propuestos como política de Estado. Los trabajadores y trabajadoras necesitamos un modelo económico y social productivo, con trabajo y salarios dignos, que garantice el desarrollo nacional y una justa distribución de las riquezas generadas. Solo estas condiciones van a favorecer el desarrollo de una sociedad más justa, inclusiva, solidaria y equitativa».

La CASIA está integrada por la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne, Sindicato Argentino de Trabajadores de la Industria Fideera, Sindicato de Trabajadores de la Industria del Hielo y Mercados Particulares, Asociación Trabajadores de la industria lechera, Unión Obrera Molinera Argentina, Federación Argentina de Obreros Pasteleros. Confiteros. Pizzeros y Alfajoreros, Federación de Trabajadores del Tabaco, Unión Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos, Unión Trabajadores Carga y Descarga, Sindicato Único de Empleados del Tabaco, Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores, Federación Argentina Unión Personal Panaderías y Afines, Federación Trabajadores de Industrias de la Alimentación, Federación Argentina de Trabajadores de Aguas Gaseosas, y Federación Argentina de Trabajadores Cerveceros y Afines.