Las dos CGT cordobesas dan libertad de acción

En un plenario conjunto encabezado por el titular de la CGT Regional, José Pihén, y de la CGT Rodríguez Peña, Gabriel Suárez, ambas centrales cordobesas firmaron una resolución conjunta donde expresan «el total acuerdo con las motivaciones que fundamentan el paro (paritarias sin tope, defensa del salario, Impuesto a las Ganancias, situación de los Jubilados)”, pero tomaron la decisión de «dejar a las organizaciones sindicales en libertad de acción».

Los titulares de las dos CGT cordobesas fundamentaron tal decisión en que en ambas conviven gremios que responden a conducciones que tienen distintas posturas con respecto al paro.

En principio, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Smata, Bancarios y UOCRA adelantaron que no se adherirán a la medida de fuerza opositora. Muchos aclararon que, aunque comparten algunos de los reclamos, como la necesidad de levantar el piso del Impuesto a las Ganancias, pero que eso no implica que vayan a parar.

Entre los gremios provinciales, la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) tampoco se sumaría al paro. La UEPC está adherida a Ctera, que tributa en la CTA oficialista que conduce Hugo 
Yasky por lo que no mira con buenos ojos la medida convocada ni a los convocantes.

Tampoco el sindicatos de los municipales de la ciudad de Córdoba (Suoem) apoyaría la huelga.

En cambio el Sindicato de Luz y Fuerza de Córdoba, que conduce el moyanista Gabriel Suárez, dijo que se sumará al paro por considerar que las reivindicaciones que plantea la medida “son propias de todo el abanico gremial”. Tamnién Alfredo Peñaloza (UTA-Córdoba) dijo que acatará lo dispuesto por la conducción nacional.

Los que seguro se plegarán a la convocatoria son los camioneros, aunque no se sabe qué ocurrirá con el gremio de recolección de residuos (Surrbac) que se encuentra enfrentado con la conducción de Moyano.

Desde La Bancaria anunciaron que no comparten el paro y que justamente ese gremio abandonó la Azopardo por haber politizado la agenda gremial.