
A menos de 24 horas del acuerdo con el Gobierno nacional y la CGT para otorgar un bono de 5.000 pesos para los trabajadores privados de carácter obligatorio, el titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, advirtió que «las empresas que no lo pueden pagar, no lo van a pagar».
El referente industrial confirmó que si bien acordaron con el Gobierno y los gremios el pago de la recomposición salarial para los empleados del sector privado y que esta será de carácter obligatoria, «las empresas que no lo pueden pagar, no lo van a pagar».
«Es una manera de paliar y volver a tener algo de poder adquisitivo. La idea es que el que pueda pagarlo ya, la empresa que tiene capacidad, lo va a hacer ya y la que no pueda, lo irá viendo en el transcurso de estos dos o tres meses«, explicó Acevedo en declaraciones a Radio Mitre.
El beneficio de 5.000 pesos para el sector privado será «no remunerativo», con lo cual no se le aplicarán las cargas sociales, y también será «a cuenta de las próximas revisiones paritarias» para compensar la caída salarial. Este punto fue una de las cláusulas que exigieron los empresarios.
Aún faltan definir algunos detalles del bono, por lo que habrá otra reunión este mediodía en el que se estipulará la forma de pago. Los empresarios insisten que, fundamentalmente las pequeñas y medianas empresas, no tienen toda la plata junta por lo que reclaman que se pague en 5 cuotas consecutivas de mil pesos.
«En caso de ser obligatorio y de 5 mil pesos en un pago, al otro día salen amparos masivos sobre la inconstitucionalidad del decreto», advirtió una alta fuente empresaria a InfoGremiales. Claro que, del otro lado de la mesa, la idea de las 5 «minicuotas» no deja conforme a los sindicalistas que ven licuar la recomposición salarial al momento de terminar de cobrarla.