
La grave denuncia recae sobre una sucursal de la heladería Cremolatti, ubicada en pleno centro cordobés, en Bv. San Juan al 511, aunque sospechan que pasaría lo mismo en otras sucursales debido a que varias de ellas responderían a la misma persona: Germán Rocca.
En esta franquicia en particular, la apoderada legal de la sucursal es María Luz Gomez, pareja de Emmanuel Rossi, socio de Germán Rocca.
La seguidilla de mensajes de Whatsapp empiezan con una frase insólita: «Estamos haciendo el esfuerzo por mantenerles a todos el trabajo así que tienen que saber aceptar las medidas que se tomen». Respondiendo a esa idea de que el trabajador o trabajadora es un sirviente que debe agradecer un gesto caritativo, y no una relación laboral con derechos y obligaciones bajo un sistema legal.
Luego vienen las indicaciones prácticas: «En primer lugar, hagan la inscripción en lo del plan del ANSES (se refiere al Ingreso Familiar de Emergencia) para ver si son o no beneficiarios, ya que ese monto formará parte de su sueldo.» Al IFE sólo pueden acceder trabajadores informales, desempleados o monotributistas de las categorías más bajas. Según consignó ADN Federal, la mitad de los trabajadores de la sucursal no estaban inscriptos.
Así mismo, los conminan a enviar una captura de pantalla con la respuesta de ANSES a si lo van a cobrar o no y además les piden los datos personales para rastrearlos en los listados del organismo. El audio que figura en las conversaciones y que aparece reenviado, sería una comunicación de Germán Rocca a sus socios en el cual los requiere, según los denunciantes, con este fin.
Las horas trabajadas las quieren pagar por lo menos. Los días no trabajados, en cambio, decidieron pagarlos «al 40-50 por ciento», así, estimativo.
Como si fuera poco, los amenazan con 75 días de suspensión sin goce de sueldo que les «otorga la ley» pero aseguran que no quieren «llegar a eso».



