
Un documento firmado por el titular de la central obrera, el visitador médico Ricardo Peidro, explicó que los despidos de trabajadores se produjeron en plena pandemia de coronavirus y sostuvo que el empresario «no abonó además la quincena al personal, lo que arriesga la continuidad laboral de más de 240 familias».
«Aunque el gobierno prohibió despedir por decreto y se trata de una de las plantas con autorización para producir, el frigorífico no funciona y sus trabajadores no cumplen ninguna tarea y no cobran en tiempo y forma», afirmó.
Angel Mileo, delegado de la Junta Interna del establecimiento, explicó hoy que el conflicto comenzó dos semanas atrás con el cierre de las instalaciones, poco antes de la decisión oficial de declarar la cuarentena ante la pandemia.
«Esa decisión dejó a 240 familias quilmeñas en la calle. El personal cobró la primera quincena de marzo, pero no la segunda», señaló el delegado gremial.
Los trabajadores realizan un corte frente a las puertas del establecimiento industrial, respaldados por la CTA Autónoma y la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), informó Claudio Arévalo, secretario general quilmeño de ambos espacios.
«En un contexto crítico para el país y el mundo, empresarios que se enriquecieron con el modelo neoliberal no dudan en despedir ante la primera crisis», dijo.
El dirigente sindical reclamó las inmediatas reincorporaciones y aseguró que el gremio estatal y la CTAA continuarán en la calle acompañando «la lucha».