La Conadu Histórica reclamó que la Universidad Nacional del Sur con sede en Bahía Blanca inicie un juicio académico contra el profesor Néstor Montezanti, acusado de haberse desempeñado como agente de inteligencia del Ejército en la Facultad de Derecho de esa casa de estudios durante la última dictadura cívico militar.
“Resulta inadmisible que a más de 30 años de la recuperación de la democracia un profesor como (Néstor) Montezanti integre el plantel docente de la Universidad Nacional del Sur”, sostiene en un comunicado la entidad gremial que representa a los docentes universitarios del país.
Montezanti, que es titular de tres cátedras de Derecho en la UNS y conjuez de la Cámara Federal de Bahía Blanca, revistó como Personal Civil de Inteligencia (PCI) del Destacamento de Inteligencia 181 de Bahía Blanca.
En esa unidad prestaron servicio varios de los condenados a prisión perpetua en el primer juicio a represores que se llevó a cabo en esta ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires.
Como profesor en la UNS se desempeñó como “asesor universitario” del Ejército entre enero de 1981 y junio de 1982, según datos aportados por el arma.
“Este gravísimo antecedente ha sido admitido por el propio Montezanti en su descargo y resulta sumamente preocupante que el órgano de gobierno del Departamento de Derecho no considere la incompatibilidad que existe entre esta función y la trayectoria democrática que un docente universitario debe tener”, remarca la Conadu histórica.
El profesor Dante Patrignani promovió en octubre de 2011 el juicio académico de Montezanti, luego de que la Asamblea Universitaria hubiera declarado que el ejercicio de actividades de inteligencia en el ámbito universitario era «algo incompatible con el carácter democrático que deben tener las labores académicas».
No obstante, el cuestionado profesor recurrió a la Justicia federal e impugnó la resolución de la Asamblea que en aquella declaración lo aludió sin nombrarlo.
A través de una medida cautelar logró suspender el juicio académico durante más de dos años, y en mayo, la Corte Suprema rechazó la impugnación del camarista y dejó sin efecto la cautelar que lo protegía.
La decisión fue celebrada por quienes se niegan a compartir la UNS con personas vinculadas con el terrorismo de Estado, pero la conducción de Derecho nunca acusó recibo.
Sin embargo, el cuestionado académico presentó una denuncia ante la Cámara Civil y Comercial de Bahía Blanca, que en octubre pasado ordenó que Patrignani le pagara 70.000 pesos al ex agente de inteligencia por “calumnias e injurias”.
No fue el único fallo que benefició a Montezanti en 2014 en el marco de su cruzada por permanecer en la UNS, ya que en diciembre, la Corte Suprema ratificó una condena por injurias contra la sindicalista judicial Graciela Díaz Paz, que también se refirió a las tareas de inteligencia que este docente realizó en la UNS durante la dictadura.
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