Algodonera Avellaneda no reabre este lunes y cada vez es más difícil la situación de sus 300 trabajadores

Se trata de la Algodonera Avellaneda, compañía textil del Grupo Vicentin. La firma confirmó que no reabre este lunes y sus 300 empleados permanecen en alerta luego de que los directivos frenaran la producción. En los últimos 2 meses trabajó al 25% de su capacidad.

En los tribunales de Reconquista, en la audiencia convocada por el juez Civil y Comercial de Reconquista, Fabián Lorenzini, la empresa Algodonera Avellaneda -en concurso de acreedores- brindó precisiones sobre su situación financiera y qué planifican para el futuro. Lo que dejó más dudas que certezas. Participaron representantes de la firma concursada, la sindicatura, el comité de acreedores, delegados gremiales, el ministro de Trabajo de la provincia, un representante del Ministerio Público de la Acusación; y otros interesados.

Durante la audiencia, se ratificó lo expresado por los síndicos en su informe previo: la empresa atraviesa una «situación muy complicada, muy delicada, con implicancias sociales muy graves». Vale recordar que la planta industrial permanece cerrada desde el 29 de septiembre.

La empresa, propiedad del Grupo Vicentin, había comunicado oficialmente al Ministerio de Trabajo y a los empleados que el cierre era solo por esta semana, pero en la audiencia blanquearon que no van a reabrir el lunes 6 de octubre.

No hay ninguna certeza de reapertura, porque la empresa no tiene materia prima, quedó un solo fasonero interesado (de baja escala) y abunda la materia prima por la sobreoferta vinculada con la crisis del sector textil, golpeado por la situación económica y, especialmente, por la apertura de las importaciones dispuestas por el gobierno nacional.

Algodonera Avellaneda no reabre este lunes y cada vez es más difícil la situación de sus 300 trabajadores

Aquí también vale recordar que los trabajadores denunciaron a la empresa ante el Ministerio de Trabajo por el cierre, acusando que esa medida es un «lockout patronal».

El tema del pago de sueldos fue uno de los puntos más sensibles abordados por los participantes. Según consta en el acta, se expusieron retrasos acumulados ya que la empresa reconoció que no ha podido cumplir con el pago completo de los sueldos correspondientes al mes de septiembre, y que aún se adeudan montos de agosto en algunos casos.

Los delegados gremiales expresaron su preocupación por la falta de certezas y pidieron que se garantice el pago de salarios y la continuidad de los puestos de trabajo. Por su parte, los representantes de Algodonera Avellaneda s.a. reconocieron las dificultades, pero aseguraron que están trabajando en alternativas para reactivar la producción y evitar medidas más drásticas.

Por su parte el ministro de Trabajo de Santa Fe, Coco Báscolo, informó que se busca un «diagnóstico de la situación» y un «plan de subsistencia» para la empresa concursada. Precisó que el informe del síndico refiere a una situación «lapidaria»: detalla en «números y en gráficos cómo se vino cayendo la producción» de la algodonera, que pasó de 800.000 kilos a menos de 200.000 en el transcurso del año, trabajando a «menos del 25% de la capacidad de producción» en los últimos dos meses.

Báscolo señaló que el diagnóstico incluye la caída del mercado interno del rubro textil, el ingreso de importaciones y la faltante de fibra de calidad en este momento del año para sus productos. Además, la empresa registra un «capital de trabajo negativo» (cuando las deudas y obligaciones de corto plazo superan a los activos corrientes en efectivo, cuentas por cobrar e inventarios; es decir, la empresa no tiene liquidez suficiente para cubrir sus compromisos inmediatos). Recordó que solo a la EPE le debe casi $2.000 millones.