Acampan contra el lock out de Cargill

El Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros Bahía Blanca-Daireaux enmarcó la medida en un «lock out patronal», en tanto, la empresa atribuyó la paralización a falta de condiciones de seguridad, según los carteles que fueron pegados en la víspera en los accesos a ambas plantas.

El prosecretario general del sindicato bahiense, Diego Márquez, señaló que «procedimos a armar un acampe en el acceso al puerto y en inmediaciones a la planta».

También comentó que «estamos esperando a que nos convoquen a una audiencia en la delegación del Ministerio de Trabajo luego que se presentara en la víspera una denuncia».
Según el gremialista «la audiencia podría llevarse a cabo la semana que viene».

«En la planta hay supervisores o jefe de turnos pero no tienen gente, si le pasa algo no tiene calderista ni para prender nada, y sinceramente es un riesgo», agregó.
Márquez comentó que en la fábrica de aceite «si llega a haber alguna emergencia no tiene a nadie porque todos los operadores están afuera» en referencia a que en la misma se desempeñan 87 trabajadores.

En Ingeniero White además la firma cuenta con una planta de producción de malta cervecera en la que sus trabajadores están nucleados en el sindicato de Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (Urgara).
Además, Cargill cuenta en Ingeniero White con una terminal portuaria propia.

En la víspera, y cuando los trabajadores concurrieron a trabajar, se encontraron con un cartel que rezaba que a raíz de «la reanudación de los paros intermitentes e irregulares» y de «manifestaciones de amenazas», no estaban dadas las «condiciones de seguridad» para operar, con lo cual se disponía una suspensión de las tareas por un plazo de, en principio, diez días.

En la presentación ante la delegación local del Ministerio de Trabajo se expresó que la empresa nuevamente «suspende las operaciones en este establecimiento (Bahía Blanca) y consecuentemente la prestación laboral sin goce de haberes a partir de las 7 horas del 19 de abril y en principio hasta las 7 del 24 de abril».

Los denunciantes responsabilizaron «en forma exclusiva a la patronal de cualquier daño, perjuicio o consecuencia que su irresponsable accionar pueda provocar en la salud y vida de los trabajadores, así como también en las propias instalaciones de la planta, en virtud de que la decisión de suspender las actividades obedece a la única razón de tomar represalias contra quienes ejercen su derecho de huelga y especialmente contra los delegados y representantes sindicales».