
El delegado de la línea que inicia su operación en Villa Adelina, el chofer Víctor Alonso sostuvo que le vienen reclamando a la empresa una inversión mínima para que los trabajadores puedan asearse al comenzar y finalizar sus trabajos diarios.
Los choferes denuncian que la empresa solo cuenta con tres personas para acondicionar higiénicamente las más de 150 unidades, no se limpian los pasamanos y apenas llegan a dejar en condiciones la cabina donde los choferes pasan más de 8 horas diarias al volante.
Además, los choferes denuncian las condiciones de los dos baños químicos en los que «apenas se pueden utilizar como mingitorios y nada más».
Alonso, chofer desde hace más de 20 años en la empresa, expicó que «Por si no fuera suficiente, también le reclamamos a la empresa un lavatorio limpio y con agua caliente como para poder higienizarse luego de estar en contacto en esta crisis con médicos, enfermeros, personal de seguridad y usuarios que diariamente están en contacto con personas de riesgo como puede ser cualquier contagiado de coronavirus».
Desde la empresa, los choferes de la 184 -identificados con agrupaciones pertenecientes a la línea del secretario General de la UTA Roberto Fernández- aseguraron que no van a volver al trabajo hasta que la empresa disponga los medios necesarios para aislar a los choferes de los usuarios y que se les garanticen obras mínimas para proteger la salud de los trabajadores.