
Juan Carlos Schmid convocó a los 18 sindicatos que integran la organización gremial a una urgente «asamblea pública» para las 11 del martes próximo en el edificio de la Administración General de Puertos (AGP), en las Avenidas Ingeniero Huergo y Belgrano.
«El puerto no se vende. La industria naval se defiende. La asamblea fue convocada ante la información de que el Estado analiza transferir el manejo del Puerto de Buenos Aires a la ciudad a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y no de un proyecto de ley y también por las últimas medidas adoptadas en perjuicio de los astilleros«, afirmó.
También sostuvo que esa medida oficial debe «en todo caso» ser debatida profundamente por los bloques legislativos del Congreso y no decidida por un decreto del gobierno.
Los trabajadores de todas esos sindicatos nacionales debatirán el martes sobre «la posibilidad de que el gobierno traspase el Puerto de Buenos Aires a la órbita de la ciudad y sobre la licitación en marcha para la concesión de sus terminales», indicó Schmid.
Todo indica que el candidato más firme a la adjudicación de la terminal única que prestará los servicios portuarios (actualmente son tres concesionarios), sería la empresa PSA de Singapur, que cuenta como uno de sus principales impulsores nada menos que a Nicolás (Nicky) Caputo, el amigo del presidente.
Ese negocio de fondo es el que apura una resolución y el único motivo por el que esta situación deba resolverse por DNU y no con tratamiendo legislativo.
Un comunicado firmado por el ex titular de la CGT sostuvo que también analizará «la transferencia a la ciudad de los terrenos de Puerto Sur y la Isla Demarchi para desarrollar proyectos inmobiliarios; las estrategias gremiales para recuperar la industria naval y sus fuentes de trabajo; la construcción nacional del Buque Polar, de remolcadores y barcazas y respecto de la renovación de la flota pesquera en los astilleros nacionales».