Aunque la temperatura no fue tan baja en los últimos meses y las ventas no cayeron tanto como esperaban, heladerías Pérsicco está atravesando una dura crisis. En octubre del año pasado había pedido la apertura de concurso de acreedores para cesar pagos y ahora cierra locales, ajusta su dotación de personal en mostrador y en planta, paga los sueldos en cuotas.
En el último tiempo cerró varios locales: sólo en las últimas tres semana le tocó a las sucursales propias de Caballito y Pilar. Según explicó BAE Negocios, antes cerraron en Devoto, las Cañitas, Recoleta, Vicente López, Puerto Madero, Nordelta y Belgrano.
Hace una semana, su sucursal de Salguero y Cabello estuvo tomada por sus empleados durante siete días.
«Tras el cierre de Caballito y Pilar, la empresa prometió pagarles las indemnizaciones y cuando llegó el momento no cumplió. Después de una semana de toma, arreglaron el pago del 100% en planes de 3 y hasta 7 cuotas», le dijo a BAE Negocios Marcelo Gasso, secretario de Organización de Pasteleros.
La situación en Persicco se complica día tras día, aunque no baja la calidad de su producto. «El mes de junio lo cobramos en tres cuotas, ya nos avisaron que julio lo cobraremos en cuatro. Hace tres años, éramos 120 trabajadores hoy quedamos 30. La producción en la fábrica bajó un 50% sólo en el último año», señaló Héctor Opsansky, delegado de la planta.