Sin acuerdo por el bono, Alimentación amenaza con acampar frente a la Cámara empresaria

La negociación por el bono de fin de año subió inesperadamente la temperatura en la industria de la Alimentación. Mientras que todos los años las discusiones se mantienen en silencio hasta anunciar los resultados, incluso con algunos extras en las firmas más importantes, este año la situación se complejizó y por el momento es una incógnita cuál será el final de la historia.

Desde el gremio elevaron un pedido de plus navideño de 6 mil pesos. La Cámara empresaria (FIPPA) primero dilató la respuesta, para luego pedir que se debata el plus navideño por establecimiento. Una dispersión que no ocurrió en períodos anteriores y que rechaza el sindicato de plano.

La curiosidad es que tanto Rodolfo Daer, secretario General del gremio de Alimentación, como Daniel Funes de Rioja, titular de la FIPPA, fueron firmantes del pacto tripartito que estableció un piso de dos mil pesos para el bono de fin de año en el marco de la mesa de «Diálogo para la Producción y el Trabajo».

Desde el gremio, que no esperaban una negativa luego de los entendimientos sucesivos que casi hicieron del bono de fin de año una institución en la actividad y mucho menos luego de que Funes de Rioja estampara su firma en el pacto con la CGT y el Gobierno, acusan a los empresarios de «negociar con mala fe» y declararon el estado de alerta y movilización.

Además, mientras sube la tensión entre las partes, el sindicato ya prepara una movilización a la puerta de la Cámara y hablan de la posibilidad de iniciar un acampar allí, hasta que las firmas revean su postura de desconocer el acuerdo tripartito que suscribieron.