La CGT no va a La Rosada y enfría cualquier negociación con Macri hasta el plenario del 29

La supuesta convocatoria formal a una reunión para plantear un Acuerdo Marco Nacional para cuidar el empleo, la productividad y el salario, en la que el presidente Mauricio Macri, el jefe de Gabinete Marcos Peña, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y el ministro de la producción, Dante Sica, sentarán a empresarios, cámaras patronales y CGT, tuvo su primer revés. Es que la cúpula de Azopardo negó su participación.

Según público Ámbito Financiero la reunión se llevaría a cabo en la jornada de hoy, aunque todo es incertidumbre. Sin embargo, entre los gremialistas hay una certeza: «No es momento para encarar esa negociación».

Es que la central obrera está en la víspera de un plenario de secretarios generales que promete ser muy caliente, en el que se definirá el camino a seguir por la cúpula cegetista. Hasta que eso ocurra no habrá contactos con el Gobierno.

Algunos pedirán, incluso, la cabeza del triunvirato el 29 y un llamado a elecciones, por lo tanto sentarse en una mesa de concertación sería sumar más ruido interno a una pelea que está en un punto alto. Como si fuera poco están muy presentes las convocatorias anteriores de Macri a los gremialistas que derivaron, inequívocamente, en fracasos.

Juan Carlos Schmid fue el primero que adelantó que no asistirá al cónclave, abocado en resolver el imbricado conflicto en el Puerto de Buenos Aires.

El otro triunviro, Carlos Acuña aclaró públicamente en declaraciones al diario Página 12 que durante el encuentro que la central sindical mantuvo el viernes pasado con Peña y Triaca, le dejaron en claro que la CGT no tiene problema en entablar un diálogo «pero todo está supeditado a lo que se resuelva el consejo directivo y el plenario de secretario generales”.

Héctor Daer, por su parte, se expresó desde sus redes sociales. «La responsabilidad del gobierno en la preservación de los puestos de trabajo es indelegable». Y agregó: «Le reclamamos a los funcionarios que adopten medidas concretas para frenar los despidos. No queremos “Acuerdos”, queremos mantener las fuentes de trabajo».