General Motors dispone un plan de suspensiones para 1.500 operarios

El titular de General Motors (GM) para el Mercosur, Carlos Zarlenga confirmó que la crisis económica que siguió a la corrida cambiaria de abril está afectando al sector automotriz.

Para evitar despidos, las autoridades de GM y la conducción del gremio SMATA Rosario acordaron un esquema de suspensiones de personal en la planta de General Alvear, que alcanza a 1.500 operarios.

El secretario general del gremio de los mecánicos, Marcelo Barros, advirtió sobre la difícil situación. Según lo acordado, serán siete días al mes hasta diciembre próximo y los empleados cobrarán esos días el 80% del sueldo de bolsillo.

La producción automotriz registró en junio un descenso de 13,4% con relación a igual período de 2017, y las ventas en el mercado interno registraron una baja de 31% en la misma comparación, según ADEFA (Asociación de Fábricas de Automotores).

La situación también es preocupante en el segmento motovehículos. En la planta de motos Guerrero, en la localidad de San Lorenzo, se redujo la jornada diaria de trabajo a los obreros. En este caso, se les paga por dichas horas no trabajadas el 75% del salario.

«Se trabaja sobre la base de que no haya despidos de ningún modo y en lo posible, tampoco suspensiones. En este caso, fue un acuerdo privado pero la provincia los monitorea en forma permanente», señalaron desde el gobierno de la provincia de Santa Fe.

El escenario es similar en Córdoba. Allí las terminales Renault e Iveco iniciaron un régimen de suspensiones por la acumulación de stock producto del freno en la ventas.